SANTIAGO.- Los
duques de Sussex, Meghan y Harry, han causado sensación durante su
gira por Oceanía, tanto por su humor y salidas de protocolo, como también por los
looks que han lucido, sobre todo los de la ex actriz.
Especial atención han llamado unas
ballerinas planas y casuales, que la duquesa ha usado para descansar de los altos tacos que acostumbra a vestir. Según han informado medios británicos, esta es
la primera vez que Meghan es vista en público con zapatos bajos, desde que su compromiso con el príncipe Harry fue anunciado en noviembre de 2017.
Sin embargo, el calzado no solo ha destacado por eso, sino que también porque
está fabricado con botellas plásticas recicladas. Las
ballerinas son de la
marca Rothy's y cuestan 110 libras (unos 96.600 pesos).
Cabe recordar que Meghan y Harry acaban de anunciar que serán padres en la próxima primavera (boreal), por lo que
se especula que la elección de zapatos planos por parte de la duquesa
tiene que ver con un asunto de comodidad durante su embarazo.
Eso sí,
Rothy's aprovechó la publicidad que le brindó Meghan y publicó en su cuenta de Instagram una fotografía de ella luciendo sus zapatos. "Meghan Markle se quita los tacones por nuestros Black Solid Point favoritos", se lee junto a la imagen, que ya tiene más de 18 mil "me gusta".
Crédito: Rothy's / Captura Instagram.
Carne de canguro, un collar de fideos y la "doble" de Meghan
Los duques de Sussex estuvieron hoy en Melbourne, la segunda ciudad más grande de Australia, donde
pudieron degustar carne de canguro y de jabalí salvaje.
Meghan y Harry entraron a la cocina de Charcoal Lane, donde el chef Greg Hampton los invitó a
"tocar, probar y oler" los ingredientes típicos australianos. Eso sí, la duquesa fue instada a evitar la pimienta de Tasmania, en tanto que su marido fue invitado a olfatear la goma de fresa.
Otros de los ingredientes que pudieron probar fueron las nueces bunya, las flores de rosella, la canela mirto, las hojas de árbol de té de limón y la menta de río.
Como ha sido la constante durante su gira,
decenas de australianos se reunieron para saludar a la pareja. "Me gusta todo lo que representan. Como seres humanos hay muchas razones para admirarlos", explicó una admiradora a la cadena de TV pública ABC.
La pareja conoció ingredientes típicos australianos junto al chef Greg Hampton. Crédito: Reuters.
Tanta es la sensación que provocaron, que
una joven que llevaba una pancarta en la que se leía "estoy aquí desde las cuatro de la madrugada",
lloró de alegría al abrazar a Harry.
"Me vas a causar problemas", bromeó el príncipe.
Por su parte,
Meghan recibió numerosos ramos de flores y
un regalo muy especial: un collar artesanal fabricado con fideos por un niño de cinco años.
"Lo he hecho con pasta, la he sumergido en pintura dorada y la he enfilado en una cuerda", explicó el pequeño.
Entre los presentes
llamó la atención de la pareja una pequeña muy parecida a Meghan cuando era niña. Era tal la similitud, que
Harry llamó a su esposa para que la conociera y se tomara una fotografía con ella.
"Creemos que ella se parece un poco a ti cuando eras más joven", le dijo uno de los asistentes a la duquesa. "Estaba justo por decir exactamente lo mismo", respondió Meghan, quien además
alabó el mensaje que llevaba la pequeña en su polera: "Las niñas pueden hacerlo todo".
Una joven se emocionó hasta las lágrimas al conocer a Harry. Crédito: AFP.