Teddy celebró su cumpleaños el domingo.
Captura de Facebook
SANTIAGO.- "El próximo año, lo llevaré de viaje", dice la mamá de un niño cuyo cumpleaños, celebrado el domingo, fue un golpe para la familia: no fue ninguno de los más de veinte invitados.
Los padres de Teddy, un niño de 6 años de Tucson (EE.UU.), le dieron a elegir al menor cómo quería celebrar su cumpleaños; con un viaje a Disney, una visita a Legoland o con una fiesta con sus compañeros de curso en algún local. Él eligió la última opción.
Era la primera vez que lo festejarían fuera de la casa, y su mamá, Sil Mazzini, mandó las "veintitantas" invitaciones a través de la profesora del colegio. Unos quince apoderados confirmaron y otros dijeron que no podrían ir, comentó la mujer.
Pero cuál fue la sorpresa que, a una hora de haber comenzado la celebración, nadie se había presentado.
Mazzini y el padre de Teddy, Ted Bollinger, se preocuparon de mantener al niño ocupado con los juegos que tenía el local de pizzas y finalmente él se distrajo. Sin embargo, Mazzini, furiosa, tomó una foto de su hijo con una evidente cara de desilusión en el momento en que esperaba sentado a sus compañeros frente a varias pizzas, puestas a disposición de los invitados que nunca aparecieron. La imagen se hizo viral, luego de que la madre la compartiera con un periodista.
"Me impactó, pero al final, cuando tuve que pagar por todo eso, me enojé", dijo la madre a New York Post, por la boleta de 130 dólares (cerca de $90 mil) que le cobraron. Hoy, tras haberse hecho conocido el caso de Teddy a nivel internacional, dice que se arrepiente de haber mostrado la foto y de exponer así al menor. Ella sostiene que fue un arrebato. "Nunca esperé nada de esto (…)
Me gustaría retroceder el tiempo y no haber mandado ese mensaje", asegura.
Con todo, hubo repercusiones positivas. Desde muchas partes del mundo, Teddy ha recibido saludos de cumpleaños y hasta regalos. Y ayer, él y su familia fueron invitados a un juego de la NBA. "No hicimos esto por llamar la atención o por los regalos. Lo hice en el momento, pero no fue inteligente. Estaba enfadada", sostuvo Mazzini.
En cuanto a Teddy, el niño volvió a clases el lunes pasado y vio a sus compañeros. "Todos los niños lo vieron y le dijeron que lo lamentaban mucho", dijo Bollinger. "Se olvidaron de ir. Fue un día difícil para él, pero ya pasó y seguimos adelante".
