Nevaeh Robinson quedó con quemaduras de primer grado y varios espacios del cuero cabelludo sin pelo.
Captura Philadelphia.cbslocal.com
SANTIAGO.- "Fue algo traumatizante", dice una niña de 13 años, al recordar el momento en que un compañero de colegio prendió fuego a su cabello y el resto de los niños se reía de ella mientras intentaba apagarlo con sus manos.
Nevaeh Robinson hoy lleva una especie de turbante en su cabeza, que le sirve para tapar los espacios sin cabello que dejó su compañero. Con sus ojos llenos de lágrimas, contó a las cámaras de Estados Unidos, lo que le pasó.
El martes pasado, estaba en un paradero a unas cuadras de su colegio, en Filadelfia, cuando un compañero prendió fuego en su rizado cabello con un encendedor.
"Cuando pasó, me asusté porque pensé que iba a morir", dijo la menor a CBS, explicando que el fuego empezó a quemar su pelo rápidamente.
La niña comenzó a golpear su cabeza intentando detener el fuego, y vio como otros niños que estaban en el lugar se reían de ella. Quedó con quemaduras de primer grado y varios espacios del cuero cabelludo sin pelo.
"La doctora me dijo que su peinado le salvó la vida", dijo su madre, Tanya Robinson.
La mujer comentó que no es la primera vez que su hija es víctima de bullying, y que hace dos años un compañero de curso le rompió un dedo. Por eso, decidió que Nevaeh comenzará en unas semanas más a estudiar desde la casa, y denunció al agresor de su hija ante la policía y las autoridades educacionales de su distrito. Quiere que lo expulsen del colegio.
De momento, la policía de Filadelfia investiga el caso y desde el distrito escolar de la ciudad declararon que "este tipo de violencia es inaceptable".