McCants había comenzado a tomar un suplemento alimentario de té verde, meses antes de ingresar al hospital por un aparente daño hepático.
Reuters
SANTIAGO.- El papá de Jim McCants murió a los 59 años por un ataque al corazón. Por eso al acercarse a los 50, él decidió mejorar su estilo de vida y quiso ayudarse con unas cápsulas de té verde, sin saber que así terminaría afectando su salud.
Este hombre, hoy de 54 años, de Prosper, al norte de Dallas (EE.UU.), nunca ha fumado y con suerte se tomaba una cerveza cada tanto, según ha asegurado. Por eso nadie podía entender por qué llegó hasta el hospital en 2014, viéndose completamente amarillo y con una aparente lesión hepática.
Le preguntaron si tomaba algún medicamento recetado y McCants respondió que no. "Luego, mi hepatólogo hizo una serie de preguntas sobre los suplementos de venta libre", contó el hombre a BBC.
En efecto, además de hacer regularmente deporte, meses antes McCants había comenzado a tomar un suplemento alimentario de té verde. Había escuchado de sus beneficios antioxidantes y que ayudaba a bajar de peso. No es de extrañar entonces que
quedara impactado cuando los médicos le dijeron que necesitaba urgentemente un trasplante de hígado, el que no podía tardar más de una semana en realizarse. Afortunadamente, al día siguiente encontraron un donante.
McCants aún sufre problemas de salud. Tiene una enfermedad renal que podría provocar en el futuro que necesitara de diálisis y de otro trasplante. Además, su actividad física se ha visto anulada ante el dolor crónico que siente en su abdomen. Por esto y por todo lo vivido, quiere demandar al fabricante del suplemento, la firma estadounidense Vitacost.
"Espero que tomen la decisión de poner una etiqueta de advertencia en el producto, en el sitio web, que la gente sepa antes de comprarlo", dice el afectado, quien alega que en ningún lado aparecen los posibles daños que puede provocar la ingesta de extracto de té verde.
Por otro lado, la única respuesta que obtuvo el medio británico de la empresa cuestionada, fue la siguiente: "Nos tomamos muy en serio la seguridad de los suplementos de nuestra marca Vitacost y respaldamos la calidad de nuestros productos".
Nutrióloga: "También ha habido casos de muerte"
La doctora Eliana Reyes no duda en advertir sobre los peligros que un suplemento alimentario como el que tomaba McCants, podría causar en una persona. La nutrióloga e integrante del programa de Obesidad y Diabetes de la Clínica Universidad de los Andes, asegura que este, al tratarse de un extracto de té verde, es un "concentrado de todas las sustancias químicas" que posee, distinto a una infusión que sería inocua para la mayoría de las personas.
Según explicó Reyes, quien también es directora de la Escuela de Nutrición en la misma casa de estudios, se ha visto que uno de los componentes del extracto de té verde
"actúa a nivel de ciertas proteínas del hígado, provocando daño hepático, hepatitis aguda fulminante y cirrosis hepática. También ha habido casos de muerte".
Se han visto tantos efectos adversos por el uso de este y otros suplementos alimentarios que el Instituto Nacional de la Diabetes y las Enfermedades Digestivas y Renales de EE.UU., lanzó el programa Red de Lesiones Hepáticas Inducidas por Medicamentos (DILIN, por sus siglas en inglés), que pretende recopilar casos graves de daño de hígado, producido por productos recetados y aquellos alternativos, como los hechos a base de hierbas y suplementos alimentarios.
Tanto Reyes como nutriólogos de otros países critican que la FDA -la Administración de Alimentos y Medicamentos de EE.UU.- considera a estos últimos como un alimento y no un medicamento, pese a que algunos contienen compuestos químicos que sí tienen efectos en la salud de la gente.
