EMOLTV

Pediatras reiteran a padres no recurrir al castigo corporal para corregir el comportamiento de los niños

La Academia Estadounidense de Pediatría entregó la declaración, explicando los efectos dañinos que tienen las palmadas en los niños, basándose en varios estudios. También aconsejan evitar los escarmientos no físicos que sean humillantes o que infundan miedo.

12 de Noviembre de 2018 | 10:13 | NYT
imagen

"Si el infante no confía en el padre, entonces nunca va a querer hacer lo que le dicen", aseguran los expertos.

Fotobanco
NUEVA YORK.- Los padres no deberían dar "nalgadas" a sus hijos, dijo la Academia Estadounidense de Pediatría en una de sus declaraciones más fuerte en contra de los efectos dañinos del castigo corporal en el hogar.

El grupo, que representa a alrededor de 67.000 médicos, también recomienda que los pediatras aconsejen a los padres no recurrir este tipo de reprimendas, que son definidas como "golpes no perjudiciales con la mano abierta con la intención de modificar el comportamiento infantil", y también dice que se eviten los castigos no físicos que sean humillantes, amenazantes o que infundan miedo.

"Una de las relaciones más importantes que todos tenemos es la relación entre nosotros y nuestros padres, y tiene sentido eliminar o limitar el miedo o la violencia en esa relación afectuosa", dijo Robert D. Sege, un pediatra de Boston y uno de los autores de la declaración.

La nueva política de la academia, que será publicada en la edición de diciembre de la revista Pediatrics, actualiza una recomendación de hace veinte años sobre disciplina que recomendaba a los padres ser "animados" a no dar nalgadas (que se entiende como un golpe o palmada en el trasero a los niños). La declaración más reciente de la organización está fundamentada en un conjunto de investigaciones que no había hace dos décadas.

Por ejemplo, un análisis de varios estudios en 2016 descubrió que no hay beneficio para los niños con estos castigos. "Puedes conseguir la atención de un niño sin duda, pero no es una estrategia efectiva para enseñarle la diferencia entre lo correcto y lo incorrecto", dijo Sege.

Estudios recientes también han demostrado que la reprimenda corporal está asociada a un incremento en la agresión y hace más probable que los niños sean intransigentes en el futuro. Las nalgadas, por sí solas, están asociadas con resultados similares a los que se ven en niños que experimentan abuso físico, afirma la nueva declaración de la academia.

Aunque el estudio no fue muy amplio, puede ayudar a proveer un fundamento biológico para otras observaciones sobre el castigo corporal, dijo Sege.

La mejor disciplina es ser empático con el niño

Entonces, ¿cuál es la mejor manera de disciplinar a los hijos? Eso depende en gran parte de la edad y del temperamento del menor, afirman expertos.

La disciplina efectiva implica ser empático y "entender cómo tratar a tu hijo en diferentes etapas de su desarrollo para enseñarle cómo tranquilizarse cuando las cosas se vuelven difíciles", dijo Vincent J. Palusci, un pediatra especializado en abuso infantil en el Hospital Infantil Hassenfeld en el Centro Médico Langone de la Universidad de Nueva York.

Recompensar el comportamiento positivo, usar "tiempos fuera" -hacer que el menor recapacite un par de minutos sobre su conducta, inmediatamente cuando se porte mal- y establecer una relación clara entre comportamiento y consecuencias, pueden ser estrategias eficaces.

La cantidad de padres que castigan con nalgadas a sus hijos va en descenso. Una encuesta realizada por Harris en 2013 a 2mil 286 adultos entrevistados en línea, descubrió que el 67% de los padres dijeron que daban estos castigos a sus hijos y el 33 por ciento indicó que no lo hacía. Sin embargo, en 1995, el 80% de los padres dijo que había nalgueado a sus hijos, mientras que el 19% dijo que no lo hacía.

La actitud sobre estos correctivos también está cambiando. Aunque en la Encuesta General Social de 2014, siete de cada diez adultos en Estados Unidos estuvieron de acuerdo con que unas "buenas y fuertes nalgadas son a veces necesarias para disciplinar a un niño", estas han perdido popularidad con el tiempo.

En la actualidad, la mayoría de los médicos no respaldan estas acciones. Una encuesta reciente a 1500 pediatras en Estados Unidos descubrió que el 74 por ciento no aprueba las nalgadas y el 78 por ciento pensó que estas nunca o rara vez mejoraron el comportamiento de los niños.

Es posible que la nueva declaración de la academia pueda generar un cambio en el futuro, según Elizabeth T. Gershoff, profesora en la Universidad de Texas en Austin y quien ha estudiado el castigo corporal en escuelas públicas.

"Muestra que estamos viendo el comienzo de un cambio en la mentalidad ", dijo, agregando que los niños "necesitan saber que sinceramente tienes el mejor interés".

"Si el infante no confía en el padre, entonces nunca va a querer hacer lo que le dicen", aseguró.
EL COMENTARISTA OPINA
¿Cómo puedo ser parte del Comentarista Opina?