"Nunca viví esta sensación", dijo el doctor retratado en la espalda del paciente.
La Nación, GDA/Eldoce.tv
SANTIAGO.- Nano Salguero dice que entró a la operación con lo peor de su vida y que salió con lo mejor. Este joven argentino, de 26 años, ingresó a un hospital de Córdoba tras ser diagnosticado con cáncer de colon; y luego del éxito del trabajo médico, decidió tatuarse el rostro del médico que lo operó junto a la fachada del recinto hospitalario donde fue intervenido.
Tal como informó La Nación, Salguero conoció al
doctor Paul Lada, un médico con 42 años de experiencia, en el hospital, cuando le informaron que sería el encargado de operarlo.
Luego del procedimiento, y "al no alcanzarle las palabras de agradecimiento por haberle salvado la vida" -indicó el medio trasandino-, Salguero llevó a cabo el radical acto de gratitud.
"Decidí hacerme el tatuaje por admiración, por salvarme la vida y por ver cómo trabaja", contó el propio Salguero a Canal 12 de Córdoba.
El paciente le mandó al doctor una foto de su tatuaje, justo el día del cumpleaños del médico, junto a unas palabras de agradecimiento.
"Nunca viví esta sensación", comentó, por su parte, Lada. "Siempre hay gente que trabaja a la par de uno: residentes, médico de planta, jefe de servicio, enfermeras. Eso hace que la situación sea mejor llevadera para el paciente y eso hace que se genere un vínculo".
Lada agregó que Salguero, tras la operación, "está bien".
"Literalmente me salvó la vida", dijo su paciente. "Tenía dolores internos, fue una cirugía de recto, por un cáncer de colon. Entré (…) con lo peor de mi vida y me fui con lo mejor".