Los conductores de los vehículos no se encontraban al interior y nadie resultó herido.
Captura de Twitter
SANTIAGO.- Alrededor de US$390 mil costarán los arreglos de tres Ferrari que un joven de Taiwán chocó tras quedarse dormido. Pero su caro problema se difundió en su país, y ya son varios desconocidos los que se han acercado para ayudarlo económicamente.
A las 3 de la mañana, Lin Chin-hsiang (20) terminó su turno en el restaurante de parilladas donde trabaja en Nuevo Taipéi, y se dirigió a su casa, donde también se encuentra la tienda de inciensos y artículos para la oración que vende su madre, viuda desde hace unos años.
En el inmueble, el joven encontró a su mamá complicada de salud e imposibilitada de ir a dejar un pedido que habían hecho desde un templo para una ceremonia que se haría a primera hora de la mañana.
Y pese a que ya eran las 5.40 am, sintió que era su obligación ir a dejar el encargo. Pero tomar el auto con todo el cansancio que tenía fue un caro error.
Tras quedarse dormido al volante, Lin chocó contra tres Ferrari que estaban estacionados.
(Captura de Twitter)
Afortunadamente, los conductores de los vehículos no se encontraban al interior y nadie resultó herido. Solo se ha visto afectada la modesta situación económica de Lin, quien dejó sus estudios a principio de año para poder trabajar y generar ingresos para su casa.
Los medios de comunicación locales afirmaron que
el informe policial indicó que Lin no había bebido alcohol y que sus antecedentes como conductor eran impecables.
(Captura de Twitter)
Asimismo, se dio a conocer la desorbitante suma que tendría que pagar: 12 millones de dólares taiwaneses, unos 390 mil dólares. Es decir, alrededor de 270 millones de pesos.
Solidaridad de extraños
Medios como BBC indican que al hacerse conocido el caso de Lin, varias personas pidieron por redes sociales a los propietarios de los Ferrari que perdonen al joven y no le cobren por las reparaciones. Sin embargo, el dueño de uno de los autos chocados señaló públicamente que trabajó mucho para poder comprarse su vehículo y que cree que es justo que se le pague por los daños.
Pero la historia del joven taiwanés llegó a los corazones de varias personas que desinteresadamente llamaron a la estación de policía local, para saber cómo podían donar dinero para ayudar a Lin.
Otros llegaron hasta la tienda familiar para entregar personalmente su aporte. "Estoy realmente agradecido con todos los que se ofrecieron a ayudar y que han venido a alentarme (…) Algunas personas pasaron mucho tiempo buscando nuestra tienda, otras no están en buena situación, pero aún así dieron dinero", dijo Lin.
Y si bien queda mucho por reunir, el joven insiste en que pagar por los choques es lo correcto.
(Captura de Twitter)
