SANTIAGO.- El colombiano Andrés López Elorez usaba sus conocimientos como veterinario para introducir bolsas rellenas de heroína líquida en los estómagos de cachorros, y así poder transportar la droga hacia Estados Unidos y no ser detectado por la policía.
Al momento de llegar al país norteamericano, a los animales les realizaban una intervención quirúrgica para extraer los productos ilícitos y poder comercializarlos junto a la banda de narcotraficantes que funcionaba en Medellín, Colombia, durante los años 2004 y 2005.
Una
investigación por parte de la policía en 2005, logró identificar el laboratorio clínico construido por el grupo, donde encontraron cerca de diez
perros, de los cuales tres de ellos contenían
droga en su interior. López, al enterarse que las autoridades ya habían descubierto el centro,
escapó a España donde fue arrestado en 2015 y extraditado en abril de 2018 a Estados Unidos para su permanencia en la cárcel, mientras se investigaba su caso.
Según informó
El País de España, el jueves pasado, Andrés fue condenado por la corte federal de
Brooklyn a seis años de cárcel por su crimen.
La
fiscalía que realizó la investigación del caso, aseguró que el veterinario fue el responsable de un
acto muy impactante y cruel. "Usó su
formación como veterinario para hacer daños e introducir droga a EE.UU. dentro del cuerpo de unos cachorros", relató la fiscalía.
Durante el juicio, el colombiano se mostró
arrepentido por haber utilizado sus conocimientos profesionales para la realización del
cruel delito. Además, contó que un profesor que lo formó en la escuela de veterinarios, le "abrió una puerta que
no debería haber cruzado".
"Fue un
accidente en mi vida. No soy el mismo de hace 15 años, aprendí la lección durante el tiempo que estuve en prisión", aseguró ante el juzgado estadounidense.
El fallo del juez explicó que el hombre utilizó sus estudios como veterinario para realizar las
intervenciones, a pesar de que dijera que seguía siendo un estudiante cuando hizo los procedimientos.
Además, se condenó el hecho de haber
puesto su granja a disposición de la banda de narcotraficantes para realizar las operaciones.
"Desempeñó un
papel activo en la trama criminal, no podrían haberlo hecho sin su asistencia", relató la fiscalía.
Por su parte, la
defensa del colombiano intenta realizar una solicitud para que el veterinario pueda ser trasladado a
España, donde
vive su familia.