Un
pingüino de El Cabo (Spheniscus demersus) albino, un
caso rarísimo en esta especie sudafricana en peligro de extinción, sorprendió a los visitante del
parque zoológico de Gdansk, en el norte de Polonia.
"Que nosotros sepamos,
no hay otro individuo igual vivo (en cautiverio) en el mundo", declaró Michal Targowski, director del recinto, en la televisión TVN24.
El bebé pingüino, que
todavía no tiene nombre y del que
aún se desconoce el sexo. "Es
tímido y un poco
asustadizo (...) No queríamos someterlo al
estrés de un examen médico exhaustivo", dijo la jefa de marketing del zoológico, Emilia Salach.
El ave llegó al mundo el 14 de diciembre, pero
su nacimiento se mantuvo en secreto hasta ahora. "Está
fuerte, con
buena salud. Come bien y, algo muy importante,
sus padres lo cuidan bien", se felicitó Targowski.
Por el momento, la cría
vive junto a sus padres y otros cuatro pingüinos, los más tranquilos del grupo de 70 que viven en el zoo de Gdansk.
Crédito: Reuters.
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Se tiene que proteger con mil cuidados para que nada malo le pase", especialmente por parte de otros pingüinos que no acepten su diferencia, advirtió el director del centro.
"Cada animal distinto en una bandada está más expuesto al rechazo y al daño (...) Podemos ver que
aún no ha sido aceptado por la mayor parte de nuestra pequeña familia de pingüinos", complementó Salach.
El
pingüino de El Cabo vive únicamente en las islas de las costas sudafricanas, entre Namibia y Puerto Elizabeth, en Sudáfrica. Su
población está cayendo drásticamente por culpa de la contaminación y de la reducción de su hábitat.