SANTIAGO.- El asma es una enfermedad respiratoria crónica que consiste en la inflamación de los bronquios y que se caracteriza por la tos, el ahogo y la dificultad para respirar de quienes la padecen. En Chile afecta a cerca del 10% de la población y es la enfermedad crónica más frecuente en la infancia.
A pesar de que antiguamente se consideraba como una condición muy limitante, hoy existen de tratamientos que permiten que las personas con asma puedan realizar cualquier actividad con normalidad.
Cristina Pierry, pediatra broncopulmonar de Clínica Alemana conversó con Emol TV acerca de los síntomas y tratamientos disponibles para el asma, y también derribó algunos de los principales mitos en torno a esta enfermedad.
En primer lugar, la especialista aseguró que el asma "se puede controlar en su totalidad y el asmático puede hacer una vida normal. Para ello lo más importante son los controles médicos, mantener un tratamiento farmacológico adecuado y alejarse de cualquier factor que podría gatillar de una crisis de asma".
Por qué se origina y cómo mantenerlo bajo control
Según explicó Pierry existen distintos elementos que pueden incidir en que una persona padezca asma. Algunos de ellos son: factores genéticos; ambientales; alergias; tabaquismo materno; entre otros.
Un punto que recalcó la pediatra es que al tratarse de una enfermedad crónica, el asma no desaparece con los años ni tiene una cura definitiva. Además, añadió que si bien la mayoría de los casos de asma se diagnostican en la niñez, hay casos de aparición tardía en la adolescencia o adultez.
"Las personas con asma no sólo pueden practicar deporte, sino que les hace muy bien hacerlo"
Cristina Pierry, pediatra broncopulmonar Clínica Alemana
A pesar de que el diagnóstico lo debe realizar un especialista, Pierry aseguró que algunos de los síntomas más comunes son “la tos nocturna, silbidos en el pecho ante situaciones como el ejercicio, el frío o la risa, y sensación de ahogo o falta de aire.
Todos estos elementos nos deben hacer sospechar del diagnóstico de asma”.
Ante determinados estímulos, los pacientes asmáticos pueden desarrollar crisis de asma. Algunos de los gatillantes más comunes según la especialista son los alérgenos, como por ejemplo el polvo; los virus como influenza y rinovirus; el tabaco y la contaminación.
“El humo del cigarro para todo el mundo es malo, pero para los asmáticos puede ser fatal. En el caso de los niños, no basta con que los padres fumen afuera, es importante que cuando fumen tomen medidas para no acarrear el humo a los niños, como cambiarse de ropa o utilizar un gorro en el pelo”, dijo Pierry.
Respecto a los tratamientos, la pediatra broncopulmonar afirmó que existen dos tipos. “El primero es
el tratamiento controlador, que es el que usan los asmáticos todos los días y que si se utiliza bien, con las dosis correcta y regularmente, debiera mantener controlada su asma”.
Los otros medicamentos con los conocidos como “de rescate”, que actúan cuando una persona está sufriendo una crisis de asma. “Son broncodilatadores, es decir abren los bronquios. En Chile el más conocido es el salbutamol”
Mitos en torno al asma
"El asma se cura solo cuando el niño crece” o "Es riesgoso que las personas con asma realicen actividad física” son algunos de los mitos que más frecuentemente se escuchan en torno al asma.
Respecto al primero de ellos, Pierry explicó que existen muchos casos de niños que se obstruyen fácilmente que son diagnosticados erróneamente con asma.
“Existe una población de niños que tienen bronquitis obstructiva recurrentes, pero estos episodios son asociados a virus, por lo que no es que se les haya curado el asma al crecer sino que nunca lo tuvieron”, dijo la especialista y reiteró que “el asma no se quita nunca, pese a que hay períodos en que las crisis son mucho menos frecuentes”.
Respecto a la realización de actividad física, la especialista recalcó que que las personas asmáticas “no sólo pueden practicar deporte, sino que les hace muy bien hacerlo. Hay una relación bastante estrecha entre asma y obesidad, por lo que hay que mejorar la capacidad física y pulmonar haciendo ejercicio”.
Si bien en algunas actividades como carreras largas y maratones, los pacientes asmáticos deberían tomar algunos resguardos como precalentar o no salir en días con altos índices de contaminación, no hay ningún deporte que esté prohibido para ellos.
