Harry, duque de Sussex, aceptó este jueves una
disculpa de una agencia de noticias que
tomó desde un helicóptero fotografías de su vivienda privada en los Cotswolds (centro sur de Inglaterra). Asimismo, el príncipe
recibirá una cantidad económica "sustancial" en concepto de daños.
En una audiencia celebrada hoy ante el Tribunal Superior de Londres, los abogados de Harry argumentaron que
las imágenes captadas por Splash News And Picture Agency del interior de su hogar, en el condado de Oxfordshire,
habían "socavado gravemente la seguridad del duque".
Un portavoz del palacio de Buckingham señaló, en un comunicado, que el hijo menor de Carlos y la fallecida Diana,
"acepta y da la bienvenida a la disculpa formal" de la agencia.
Las imágenes
fueron tomadas el 9 de enero pasado, y mostraban "la
zona del comedor y la sala de estar de la casa
y el dormitorio", según alegó la defensa del duque.
El letrado Gerrard Tyrrell, que leyó ante el tribunal un texto en representación de su cliente, remarcó que las fotografías fueron publicadas por el periódico británico "'The Times' y otros portales online".
Tyrrell recordó que Harry y su esposa, Meghan, habían elegido esa casa por "el alto nivel de privacidad" que ofrecía, si bien ahora, a raíz de lo sucedido, "ya no pueden vivir más en esa propiedad".
Según apuntó el abogado, Splash "acordó pagar una suma sustancial en concepto de daños y costes legales, y se disculpó ante el duque".
Recordó que la agencia se comprometió a garantizar "que dejará de vender, divulgar, publicar o poner esas fotografías", y a "no repetir esa conducta".
En una nota, la agencia reconoció que su actuación representó un "error de juicio", por lo que se adoptaron medidas "para asegurar que no se repetirá".
El duque de Sussex y su esposa Meghan, se convirtieron recientemente en padres de un niño al que llamaron Archie Harrison. La familia vive en Frogmore Cottage, una residencia ubicada en los terrenos del Castillo de Windsor.