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Las
mujeres posmenopáusicas pueden
combatir los sofocos y la sudoración nocturna con
entrenamientos de resistencia, como levantar pesas, según un estudio clínico realizado por la Universidad de Linkoping (Suecia).
"El entrenamiento de resistencia ya
se recomienda para todas las mujeres, pero ahora podemos ver que
también puede ser efectivo para los sofocos en la menopausia", aseguró Emilia Berin, doctora de la Universidad de Linkoping y autora principal del estudio.
La
terapia con hormonas es el
tratamiento más efectivo para los sofocos y los sudores nocturnos, los cuales afectan a la mayoría de las mujeres durante la menopausia. Sin embargo, según afirmaron los investigadores, algunos estudios sugieren que
el ejercicio puede ayudar a calmar los sofocos también, pero otros no han encontrado ningún efecto.
Por este motivo, Berin y sus colegas
escogieron al azar a 58 mujeres que experimentaron al menos cuatro sofocos de intensidad moderada a severa o sudores nocturnos diarios. A
un grupo se le asignaron
15 semanas de entrenamiento de resistencia y en el
otro grupo de control los miembros
no cambiaron su actividad física. Ninguno de los participantes hizo ejercicio con regularidad antes del ensayo y tampoco había usado terapia hormonal en los dos meses anteriores.
El régimen del grupo de ejercicios incluyó tres sesiones semanales de 45 minutos con seis ejercicios en máquinas de resistencia y dos ejercicios usando peso corporal. Las mujeres trabajaron con pesas más ligeras durante las primeras tres semanas y luego con cargas cada vez más pesadas.
"Las mujeres menopáusicas (o cualquiera) interesadas en comenzar el entrenamiento de resistencia deben comenzar con cargas más livianas en la primera semana para evitar lesiones", señaló Berin.
El grupo de ejercicios tenía un promedio de 7,5 sofocos o sudores nocturnos al día al comienzo del estudio, sin embargo, después de 15 semanas tuvieron un promedio de 4,4 episodios al día. Por su parte, en el grupo de control prácticamente no hubo cambios, pasaron de 6,6 a 6,5 sofocos diarios.
Una opción para las mujeres que no quieren o no pueden tomar hormonas
"La mujeres que no son candidatas a la terapia hormonal o que prefieren evitar las hormonas en la menopausia, necesitan alternativas probadas para ayudar con los sofocos", aseguró JoAnn Pinkerton, directora ejecutiva de la North American Menopause Society y profesora del sistema de salud de la Universidad de Virginia en Charlottesville (EE.UU.).
Por este motivo, Pinkerton concluyó que "es emocionante que este estudio de 15 semanas de resistencia haya mostrado una disminución en la frecuencia y la gravedad de los sofocos moderados y graves entre las mujeres posmenopáusicas".
Por su parte, Berin agregó que la investigación futura debería determinar si el entrenamiento de resistencia podría beneficiar a otros grupos que sufren sofocos pero no pueden o no toman hormonas, incluidos los pacientes con cáncer de mama y los pacientes con cáncer de próstata que reciben terapia de privación de andrógenos.