La británica
Helen Rudd (55) vivió uno de los momentos más aterradores de su vida, cuando en mayo de 2006 fue atropellada por una camioneta mientras iba en camino a su trabajo. Ese día llovía mucho por lo que la visibilidad no era buena, y mientras cruzaba la calle sintió el golpe que le dejó
heridas graves en la cabeza y otras partes del cuerpo.
La mujer contó al medio inglés
The Guardian que fue trasladada al hospital de la ciudad en
Hasting, Reino Unido, donde fue puesta en
coma inducido durante tres semanas debido a la gravedad de sus heridas.
Sin embargo, una inusual situación le sucedió al empezar a salir del coma.
"La cosa más rara fue que cuando desperté mis primeras palabras fueron en francés", contó la inglesa, añadiendo que en un principio los especialistas recomendaron a sus conocidos que siguieran respondiéndole en el mismo idioma, ya que pensaron que sería una buena idea para fomentar la comunicación.
"Ellos me hacían preguntas en francés, y yo les respondía en un fluido francés. Nadie sabía por qué.
Yo había tenido clases básicas de alemán y francés hace 30 años", indica Rudd.
Después de un tiempo los doctores acordaron que era mejor para Helen que sus cercanos empezaran a hablarle nuevamente en inglés, ya que ese era su idioma nativo y el que se estuvieran comunicando en francés no le estaba ayudando a recordarlo.
"Antes de mi coma nunca había escuchado hablar sobre el
síndrome del idioma extranjero (…) Yo realmente hablaba francés, y no solo por unos segundos, sino que por dos semanas", cuenta Hudd, agregando: "Todavía no entiendo por qué.
Nunca he tenido el deseo de visitar Francia".
Para retomar su inglés, sus cercanos la ayudaron con música, libros y su padre le cantaba canciones infantiles, lo que hacía que se alegrara mucho al ver cuando ella respondía en inglés.
La británica tuvo que pasar algunos meses en el hospital, y después fue trasladada a un centro de rehabilitación cerebral, donde se estuvo durante un año. En ese tiempo tuvo que aprender todo nuevamente, incluso a respirar por ella misma. Ese período no lo recuerda, pero sus amigos le relataron todo lo que sucedió durante su recuperación.
Explicación detrás del fenómeno
El doctor
Rodrigo Vega, neurólogo de Clínica Vespucio, explica a
Emol que si bien
este síndrome es muy raro, efectivamente existe. Sin embargo, no tendría relación con pacientes que están en coma, sino que se produce debido a algún daño en el cerebro.
"Lo más clásico son
traumas y accidentes vasculares, estas son las causas más conocidas. Pero más que el idioma extranjero, lo más común es que sea un tema de
acento extranjero. Este es otro síndrome donde siguen hablando su lengua nativa, pero les cambia el acento, por ejemplo en un estadounidense se ponen a hablar con acento británico", relata el médico.
Para entender por qué se dan estos extraños fenómenos, el neurólogo explica que para el caso del acento extranjero
se dañan las estructuras del cerebro que tienen que ver con los procesos de planificación del lenguaje, como la elaboración y la programación de lo que voy a decir. "Eso afecta principalmente las áreas del lado izquierdo, en el lóbulo frontal del cerebro", explica.
En el caso del cambio de idioma extranjero, Vega asegura que son casos muy raros y no existen muchos registrados. "La teoría que hay, es que son distintas las áreas de la corteza cerebral que ocupamos para hablar nuestra lengua materna que las que ocupamos para idiomas aprendidos, y la mayoría de los casos que hay publicados pasa eso, pierden la lengua materna y se
ponen a hablar en un idioma que aprendieron en algún momento de la vida", señala Vega.
"No es que yo me pego en la cabeza y mágicamente empiezo a hablar en otras lenguas, no,
es algo que yo he aprendido", aclara el neurólogo.
Con respecto al caso que contó la británica, el médico explica que
el accidente de tránsito del que fue víctima, fue lo que le provocó un daño dentro de la corteza cerebral, y como estuvo en un coma inducido durante esas semanas no se podía comunicar, por lo que no podían ver los signos del síntoma. Es por esto que recién al despertar pudieron notar el cambio de idioma.
El neurólogo además cuenta que actualmente tiene el caso de una
paciente que es profesora de inglés y que pasó por una hemorragia subaracnoidea hace algunos años (cuando un vaso sanguíneo inflamado en el cerebro se revienta), y
vivió el síndrome del acento extranjero. "Ella quedó hablando inglés", señala.
Sin embargo, en general,
estos casos vuelven a la normalidad y hablar su lengua materna, cuenta Vega. "La gran mayoría se recuperan dentro de un plazo de días a semanas, es algo temporal", finaliza.