SANTIAGO.- Desde hace unos años los
viajes corporativos o de negocios han experimentado una marcada transformación en su concepción más profunda, dejando de ser considerados como una “obligación necesaria” para transformarse en
una oportunidad para conocer y aprovechar las bondades de los lugares de destino extendiendo por algunos días la permanencia antes de retornar al trabajo.
Esta práctica es conocida como “bleisure” y si bien hasta hace unas décadas era una posibilidad casi inexistente, hoy es una realidad que nace de la incorporación de nuevas generaciones a la fuerza laboral (millennials y centennials), un explosivo desarrollo tecnológico, la modernización de la industria de los viajes y la adopción de esta tendencia por parte de las empresas.
Una necesidad que toma fuerza
Y es que en los países más desarrollados esta práctica, cuyo nombre se origina de la combinación de los conceptos ‘business travel’ y ‘leisure travel’, ya dejó de ser vista como una simple moda, para ser considerada como un ‘must’ de los nuevos viajeros.
En pleno apogeo de las redes sociales, estar en algunas de las principales urbes del planeta y pasar del hotel a reuniones y de vuelta al aeropuerto parece inconcebible. Por ello, se entiende que existe un creciente apoyo corporativo a permitir e incluso fomentar el “bleisure”, toda vez que esto mantiene felices a los colaboradores y eso se traduce en una forma efectiva de aumentar la productividad.
"Las empresas de a poco han ido internalizando el concepto, y están permitiendo adelantar una salida o atrasar un regreso para poder disfrutar el destino de manera particular, sin embargo se debe ir avanzando en formalizar esta buena práctica en las políticas de viaje, con apoyo de las áreas de capital humano en coordinación con adquisiciones"
Alejandra Rivas, Head of Business Managers de Turavion
El estudio Bleisure Traveler Trends de 2018 aterriza esta afirmación al entregar los resultados de una encuesta realizada a unos 2.500 viajeros profesionales de negocios.
El informe revela que durante el periodo analizado un 80% de los consultados decidió incluir tiempo para destinarlo al relajo y el ocio, cifra que no deja de llamar la atención considerando que en 2016 ese monto sólo llegaba a un 52%.
En el mismo informe, según cifras proporcionadas por la empresa de gestión de viajes Egencia, se observó que un 68% de los encuestados contrata un servicio “bleisure” entre 1 y 3 veces al año.
Otro informe, presentado durante 2018 por Hilton Hotels & Resorts, reveló además que el 70% de los consultados, entre los 25 y 35 años edad, desean ampliar sus viajes de trabajo por motivos de ocio.
Mejor servicio de las empresas
Desde Turavion, una de las empresas más antiguas y con más experiencia de la plaza nacional, aseguran que el “bleisure” cada día gana más terreno y eso ha obligado a actualizar y flexibilizar las políticas de viajes.
Así lo dijo Alejandra Rivas, Head of Business Managers de la firma, quien añadió que de esa manera se pueden dar más y mejores respuestas a las actuales necesidades de los clientes, conciliando de mejor formar sus demandas personales (ocio) con los objetivos laborales en los viajes corporativos.
"De a poco las organizaciones, desde sus áreas de capital humano, han ido incorporando la manera de medir factores de felicidad de sus colaboradores, y dentro de ellos está conocer el estrés de los pasajeros que viajan de manera permanente o aquellos que pueden viajar más distanciado a destinos lejanos, y han ido adaptando sus políticas de viaje interna permitiendo adelantar una salida o atrasar un regreso para poder disfrutar el destino de manera particular, sin generar costos adicionales, ya que son financiados de manera personal", explicó la ejecutiva de Turavion.
De esta manera, añadió Alejandra Rivas, el límite que antes dividía los viajes de negocios con los de placer, se hace cada vez más difuso y las compañías han ido tomando las medidas para adaptarse a los nuevos tiempos y tendencias.
