A pesar de que la modelo y cantante franco-italiana
Carla Bruni mide alrededor de 175 centímetros, y su esposo, el ex Presidente del país europeo,
Nicolas Sarkozy, está cerca de los 166 centímetros, en la portada más reciente de la revista Paris Match no lo aparentan.
La fotografía principal de la nueva edición de la publicación francesa, donde aparece la pareja abrazada en el patio de su casa en París, con la cantante apoyada en el hombro de su marido, no estuvo exenta de polémica después de que
varios usuarios en redes sociales hicieran notar que las alturas de ambos no encajaban con la realidad.
Crédito: Paris Match / Instagram"Sarkozy tiene 64 años.
¿Hasta qué edad se crece en Francia?", escribió un usuario en Twitter. "Lo que ha crecido Sarkozy" y "Sarkozy ha dado el estirón", "Se subió a un botín… Nunca fue más alto que Carla", fueron otros de los comentarios por la portada de la revista. Algunos incluso calificaron la selección de la imagen como machista.
Crédito: Idafe Martín Pérez / TwitterLa fotografía también provocó cientos de
memes para ridiculizar el hecho de haber puesto al ex Presidente más alto que Bruni, donde destacaban imágenes de Sarkozy en una tarima o de puntillas intentando alcanzar la altura de su esposa.
El jueves, después de los diversos comentarios que se generaron por la publicación, la revista compartió en su sitio web un
comunicado explicando que la imagen no había sido retocada para aumentar la altura del político, sino que
había sido decisión del fotógrafo a cargo de la sesión. "La portada de Paris Match esta semana ha provocado numerosas reacciones. Algunos encontraron llamativo ver a Nicolas Sarkozy más alto que su esposa, Carla Bruni", escribieron en el inicio del mensaje, titulado como
"No, Nicolas Sarkozy no ha sido retocado para parecer más alto". "Durante la sesión, realizada a finales de junio, la pareja fue fotografiada por
Sébastien Valente en varios lugares de su casa de París, incluso en la escalera exterior, como se puede ver en las imágenes publicadas en la revista. Nicolas Sarkozy se encontraba, en la imagen elegida para la portada, en un escalón más alto que en el que estaba su esposa", finalizaron, en un intento por poner punto final a la polémica.