SANTIAGO.- La vesícula biliar es un órgano pequeño del sistema digestivo que almacena y distribuye la bilis que produce el hígado. A pesar de que su función no es vital para el organismo, los problemas que pueden afectar a esta parte del cuerpo son varios y no atenderlos a tiempo puede traer importantes consecuencias.
El problema más frecuente son los cálculos biliares, o colelitiasis. Esta enfermedad es de alta frecuencia en Chile y afecta principalmente a mujeres sobre los 30 años. Pero además, en la vesícula se pueden desarrollar pólipos o abultamientos, que crecen en el recubrimiento interno de este órgano.
Tanto en el caso de los cálculos como en el de los pólipos vesiculares, el tratamiento más recomendado es la extirpación de la vesícula. Cristián Cavalla, jefe de Cirugía Digestiva de Clínica Alemana, explicó que hoy la tecnología permite que estos procedimientos se realicen de forma mínimamente invasiva.
“La tecnología ha permitido que en nuestro país la gran mayoría, si no el 100%, de las colecistectomías se realicen por mínima invasión. Esto significa que, en vez de hacer una gran incisión en el abdomen, se realizan pequeñas incisiones, y mediante pinzas se localiza el órgano y se realiza la operación, método que denominamos laparoscopía”, explicó el especialista.
Pero además, en el último tiempo ha crecido la tendencia de realizar operaciones ambulatorias, que permiten recuperaciones más rápidas para los pacientes.
El riesgo que corre el organismo es muy importante si estos problemas aparecen de forma aguda y no son tratados adecuadamente.
Cristián Cavalla, jefe de Cirugía Digestiva Clínica Alemana
“El estándar en Chile es que los pacientes que se operan de la vesícula se queden hospitalizados una o dos noches. En Clínica Alemana tenemos un programa donde, desde hace un tiempo, estamos realizando colecistectomía laparoscópica de forma ambulatoria. Esto quiere decir, que el paciente es operado temprano en la mañana y en la tarde de ese mismo día puede irse a la casa con el dolor controlado y de forma segura”, destacó.
El jefe de Cirugía Digestiva destacó que este método puede servir para incentivar que más personas se operen a tiempo. “Los pacientes se recuperan más rápido, se reintregran mas rápido al trabajo, las personas que les gusta hacer deporte pueden volver a hacer deporte antes, y todas estas cosas hacen que venir a operarse a la clínica no sea un evento traumático ni para el alma ni para el cuerpo”, señaló el especialista.
La importancia de extirpar la vesícula a tiempo
Muchas personas desconocen que los cálculos a la vesícula no siempre van acompañados de dolor o molestias intensas. Por eso, en algunos casos pueden pasar meses o años antes de que accedan a un tratamiento.
Respecto a esto, Cavalla advirtió que el problema de no operar a tiempo es que, en el caso de los cálculos, estos pueden tapar la desembocadura de los distintos conductos que llegan desde la vesícula hasta el intestino. “Esto produce una colecistitis, que es un ataque agudo a la vesícula que no se quita solo y que produce un intenso dolor".
Otros problemas que pueden desarrollarse si no se opera a tiempo la vesícula es la colangitis, la pancreatitis e incluso el cáncer de vesícula, que es uno de las enfermedades oncológicas con mayor mortalidad en mujeres.
Por eso, el especialista recomendó acudir con un especialista si se tiene sospecha de que puede tener cálculos biliares y no postergar el tratamiento.
“Pensar que si no produce dolor se puede postergar meses o incluso años el tratamiento es realmente peligroso. El riesgo que corre el organismo es muy importante si estos problemas aparecen de forma aguda y no son tratados adecuadamente”, advirtió el cirujano.
Para conocer más sobre las patologías que afectan la vesícula y cómo identificarlas revisa la entrevista completa.
