La princesa de Asturias,
Leonor de Borbón, presidió este viernes la edición XXXIX de los Premios Princesa de Asturias, ceremonia en la que todas las miradas estuvieron puestas en el
debut de la hija mayor de los reyes Felipe VI y Letizia, que permaneció
atenta y sonriente.
El evento tuvo lugar en el Teatro Campoamor de Oviedo.
Felipe VI vistió un traje negro y corbata en tono azul, mientras que su esposa un vestido de largo midi con pedrería y drapeado en la cintura en color burdeos.
Leonor, en tanto, lució un vestido corto azul de tablas y su hermana, la
infanta Sofía, también optó por un vestido corto en tonos beige. Por su parte, la reina emérita escogió un traje de falda y chaqueta de color malva.
Las gaitas entonando el himno de España y un sonoro aplauso sirvieron de arranque a la gala.
El
discurso más esperado era el de la princesa Leonor, al ser esta la primera edición a la que asiste y
sus primeras palabras en público. Ante la
mirada emocionada de sus abuelas, la reina emérita Sofía y Paloma Rocasolano, escogió este 18 de octubre para pronunciar sus primeras declaraciones en público y Asturias como escenario, al sentirse
"muy honrada" por llevar el título de
Princesa de Asturias, un título que la compromete "con la entrega y el esfuerzo de servir a España y a todos los españoles".
Durante su discurso reconoció que
este momento será "inolvidable" para ella. Leonor, que tiene
13 años, recordó que su padre, el rey Felipe VI, intervino en el mismo escenario a su misma edad y se unió a sus palabras cuando dijo que llevará ese día "en lo más profundo" de su corazón.
Tras recordar que su madre, la reina Letizia, nació en el Principado y que ella lleva "sangre asturiana", Leonor de Borbón recibió una
gran ovación del público asistente, al igual que cuando agradeció a su abuela, la reina Sofía, su presencia en la ceremonia. "Ella sabe lo importante que para mí es su presencia en esta ceremonia, que significa tanto para Asturias y para toda España", resaltó.
Leonor de Borbón reconoció que
llegó con "mucha ilusión" a este día, y explicó que sus padres siempre les han hablado, a ella y a su hermana la infanta Sofía, de Asturias, de su cultura, historia y tradiciones, además de su naturaleza. La princesa quiso también tener un
gesto con los premiados, a los que
se dirigió tanto en inglés como en castellano.
Crédito: EFE.
Visiblemente emocionado, y con miradas cómplices hacia su hija en todo momento, el rey
Felipe VI subrayó el papel constitucional de la heredera de la Corona.
"La obligación de servir a España y a los españoles debe ser el mayor orgullo y el máximo honor que puedas alcanzar. Tu deber será actuar siempre con el ánimo esperanzado, con coraje y con valentía; creciendo en responsabilidad, en bondad, y en ejemplaridad", le dijo el monarca a su hija.
Tras recordar la primera ocasión en la que él participó, hace 38 años, Felipe VI le señaló a su hija que su presidencia de honor de la Fundación Princesa de Asturias corresponde al "compromiso personal e institucional" que tiene con España como heredera. Un compromiso, añadió, que deberá "renovar permanentemente con dedicación, espíritu de servicio, lealtad y responsabilidad", también con "humildad" y siendo consciente de su "posición institucional, haciendo de la Corona día a día una referencia de servicio" al país porque "eso es lo que de ella esperan" los ciudadanos.
Felipe VI reconoció que
la presencia de sus hijas en la ceremonia convierte esta edición en un
acto "cargado de simbolismo", por el vínculo de la Corona con una tierra reflejado en un título que él mismo llevó "orgulloso" como heredero, y por el significado de unos galardones que "trascienden todas las fronteras y llegan a todos los rincones del conocimiento".
Mira a continuación el discurso completo de la princesa Leonor:
