SANTIAGO.- En Chile se estima que el 32% de la población, más de cinco millones de personas, sufre dolor crónico. Las causas de este problema son muy variadas y pueden ir desde lesiones productos de traumas o cirugías; hasta enfermedades como artritis, diabetes, fibromialgia o cefaleas.
Aprender a vivir con dolor crónico puede ser complejo para los pacientes al principio, ya que esta patología no sólo tiene una consecuencia en la salud física, sino que tiene un impacto en la vida emocional, afectiva, laboral y económica de los pacientes.
Así lo explicó en entrevista con Emol TV Carolina Tanco, médico geriatra, jefa del Instituto de Neurorehabilitacion del Hospital Clínico Mutual de Seguridad y secretaria de la Sociedad Chilena de Geriatría y Gerontología.
En primer lugar, la especialista aclaró que lo que diferencia el dolor crónico del agudo es que
su duración es de más de tres meses. “A veces se piensa que un dolor es crónico o no dependiendo de su intensidad, pero en realidad no tiene que ver con eso, sino que con la temporalidad”, señaló la geriatra.
Por otro lado, señaló que si bien es un problema que afecta transversalmente a la población, quienes se ven más afectados son las personas laboralmente activas. Según un estudio realizado por la Asociación Chilena para el Estudio del Dolor, el 40% de los pacientes que reportaron dolor crónico se encuentran en edad de máxima producción laboral (30 a 49 años).
Por otro lado, se estima que el 30% de las personas mayores sufre discapacidad producto del dolor crónico y para muchos este problema significa muchas veces tener que retirarse anticipadamente del mundo laboral, lo que conlleva además un impacto económico para los pacientes.
Tratamiento oportuno y su efecto en la calidad de vida
Uno de los impactos más significativos del dolor crónico es en la salud mental y emocional de los pacientes. La geriatra aseguró que esta patología se correlaciona con el desarrollo de síndromes neuropsiquiátricos como la depresión. “Cuando el dolor es de muy alta intensidad o se perpetúa durante mucho tiempo sin tratamiento, puede dar incluso lugar a depresiones mayores que implican incluso riesgos suicidas”, dijo.
Por otro lado, el no tratar a tiempo el dolor crónico puede desencadenar en personas de edad avanzada fallas cognitivas y de memoria.
En segundo lugar, el dolor crónico también tiene un impacto en la productividad laboral. “Nuestros números como Mutual de Seguridad hablan de que el dolor crónico es la principal causa de licencias prolongadas”, señaló Tanco.
Es importante que todo el entorno de la persona pueda colaborar con la mantención de los tratamientos, porque son de largo plazo y deben ser tomados de forma rigurosa.
Carolina Tanco, médico geriatra
Respecto a las alternativas para tratar el dolor crónico, la especialista aseguró que hoy en día “
los tratamientos son muy efectivos y permiten que las personas puedan volver a ser absolutamente funcional, poder dormir bien, volver a trabajar, relacionarte con seres queridos sin estar irritables, y lo más importante ser felices ”.
Carol Vera, de 48 años, sufre fibromialgia, túnel carpiano, tendinitis de hombro derecho y tendinitis de manguito rotador izquierdo. A pesar de que es técnico paramédico, actualmente se encuentra con licencia médica.
“Los médicos se equivocaron mucho conmigo y perdí mucho tiempo”, señala Vera y añade que después de pasar 15 años obteniendo distintos diagnósticos y visitando distintos traumatólogos, reumatólogos, kinesiólogos y neurólogos, hoy finalmente está recibiendo el tratamiento adecuado para su problema. “A veces cuesta que el entorno de uno comprenda. Como no es evidente, nadie te cree”, señaló.
En ese sentido la geriatra aseguró que una parte importante del tratamiento es contar con el apoyo de familiares, amigos y del círculo laboral. “Es importante que todo el entorno de la persona pueda colaborar con la mantención de los tratamientos, porque son de largo plazo y deben ser tomados de forma rigurosa”, dijo Tanco.
Finalmente, la especialista recalcó que “es importante que las personas sepan que vivir con dolor no es natural. Si bien el dolor forma parte de nuestra vida frente a un evento traumático o una enfermedad, es clave consultar y tratar el dolor crónico de manera oportuna, porque no es necesario padecerlo o sufrirlo”.
