Durante un acto escolar, Axel Kicillof cuestionó la prohibición de usar el lenguaje inclusivo en los colegios.
La Nación, GDA
El gobernador de la Provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, se diferenció de la postura que adoptó el Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, que prohibió el uso del lenguaje inclusivo en los colegios.
Durante un acto escolar –de promesa de lealtad a la bandera argentina–, frente a un centenar de alumnos de 15 municipios provinciales, Kicillof habló de la rebeldía que caracterizó en su momento al creador del símbolo patrio trasandino, afirmando que "acá, en la provincia, también rebelarse es hablar como uno quiere, como una quiere, expresar lo que uno siente".
"Hoy, a tanto tiempo de la Revolución de Mayo, desde España no nos van a explicar las palabras que usamos", sostuvo el gobernador, sin mencionar directamente a la Real Academia Española (RAE), que se ha mostrado crítica sobre el uso del lenguaje inclusivo.
"No nos gusta, chicos y chicas, prohibir. Nos gusta que puedan expresarse, decir lo que sienten, ser libres", sostuvo.
En tanto, ayer, la jefe de Educación Pública del municipio de Berisso, Susana Aguirre Ponce, fue abucheada por algunos padres luego de que, también en un acto de juramento de la bandera, leyera un texto en el que utilizó ese lenguaje.
"Mis querides estudiantes", dijo la funcionaria y enseguida se oyeron los murmullos en el salón. "Ah, no, no puede ser", decían algunos de los padres presentes. Tratando de sobreponerse a los ruidos que intentaban interrumpir su lectura, ésta prosiguió: "En el que día a día, debemos construir la democracia que nos ennoblece y conquistar el conocimiento que nos libera, y nuestro futuro y el de las sucesivas generaciones de argentines", señaló.
