Reveladores datos sobre la vida sexual de los chilenos arroja un estudio elaborado por la consultora GfK, a propósito del "Día Internacional del Sexo", que se conmemora el próximo 6 de septiembre.
"En los últimos años se ve una clara apertura de los chilenos en relación con su vida sexual (...) incluso en momentos donde el confinamiento no permitía mayores contactos, encontraron la forma a través de sexting"
Sebastián Medina, director de investigación GfK
De acuerdo al sondeo –en el cual se encuestaron 4 mil personas de las principales ciudades del país y de todos los grupos socioeconómicos–, el 69% afirma tener una vida sexual activa. Sin embargo, la mayoría se declara insatisfecho.
En cuanto a la frecuencia, más de la mitad (el 56%) admite estar de acuerdo con la afirmación: "Me gustaría tener más sexo del que tengo actualmente". La menor satisfacción es más prevalente en hombres (63%) que en mujeres (49%); y en quienes están en pareja (66%) que en los solteros (53%).
Respecto del nivel de satisfacción en la relación sexual misma, menos de la mitad de las personas (43%) dice haber llegado al orgasmo con facilidad. De quienes lo logran, el 48% son hombres y el 38% mujeres. De las encuestadas de género femenino que no llegan al orgasmo, el 23% finge tenerlo ante su pareja.
El sexting y el uso de juguetes eróticos aumentaron durante la pandemia
Otro fenómeno que aparece reflejado en la encuesta es que en los últimos años –especialmente en tiempos de cuarentena debido a la pandemia– aumentó de manera considerable el interés por experimentar y probar métodos complementarios o lúdicos en el ámbito sexual.
Solo el 38%de las mujeres dice llegar al orgasmo con facilidad. En hombres es el 48%
Así, el uso de lubricantes subió de un 22% en 2017 a un 48% en 2022; el sexting (fotos, chats y sexo virtual) pasó de un 13% a un 33% en el mismo periodo; el uso de juguetes eróticos aumentó de un 13% a un 28% en cinco años; los disfraces pasaron de un 13% a un 19%; y el uso de viagra subió de un 8% a un 16%.
En general, los hombres admiten con mayor frecuencia usar algunos de estos métodos, incluyendo Apps de encuentros y tríos; mientras que las mujeres se declaran usuarias de juguetes y disfraces en su vida sexual.
Finalmente, cuando ya nada funciona, el 34% reconoce haber sido infiel, situación mayoritaria en hombres, con un 41%, versus el 27% de las mujeres; también los mayores de 57 años y mayoritariamente del estrato social ABC1.
"Durante los últimos años se ve una clara apertura por parte de los chilenos en relación con su vida sexual. Cada vez se encuentran más dispuestos a arriesgarse y probar nuevas experiencias, sumando juguetes y disfraces; incluso en momentos donde las medidas de confinamiento no permitían mayores contactos, encontraron la forma a través de sexting", comenta Sebastián Medina, director de investigación en GfK.
Cae el uso de anticonceptivos y de chequeos para detectar ETS
También se comienzan a constatar diferencias en la mirada sobre el sexo en las generaciones más jóvenes. Así, la "Generación Z" (nacidos entre 1997 y 2000) está más abierta a probar con ambos sexos (16% de los encuestados); mientras que en los Millenials (nacidos entre 1981 y 1993) esta disposición llega al 5%.
En la población en general, el 91% opta por tener relaciones con personas del sexo opuesto.
El estudio revela, además, una importante baja en uso de los métodos anticonceptivos, pasando de un 70% en 2019 a un 53% en 2022. Esto es más notorio en los hombres, con un descenso de 19 puntos porcentuales, mientras que en las mujeres la baja es de 7 puntos.
El 16%de los jóvenes de la "Generación Z" están abiertos a probar con ambos sexos
La "Generación Z" es la que presenta mayor preocupación por el uso de anticonceptivos (76%); seguido por los Millenials, con un 56%.
El condón (23%) y las pastillas anticonceptivas (15%) siguen siendo los principales métodos, aunque igualmente presentan caídas respecto de 2019, cuando su uso se extendía al 35% y 24%, respectivamente.
Otro dato preocupante es el bajo interés de las personas por realizarse exámenes para detectar enfermedades de transmisión sexual: Más de la mitad (52%) admite no estar preocupado por hacerse chequeos en ese sentido. Solo un 19% de hombres sí se los realiza, mientras que un 31% de las mujeres consulta por su salud sexual.
Al respecto, Medina comenta que "los últimos años de pandemia también trajeron consecuencias negativas, como la disminución significativa de la prevención y control de enfermedades de transmisión sexual. En tiempos donde el foco se centraba en el cuidado frente al covid-19, la salud sexual pasó a un segundo plano, con menor uso de preservativos y baja frecuencia de realización de exámenes para detectar este tipo de enfermedades". "El desafío en estos nuevos tiempos es como compatibilizamos una vida sexual satisfactoria, sin perder la responsabilidad en el cuidado personal y del otro", afirma.