La noche del 18 de febrero de este año, Diego Barría de 32 años, salió de su casa para andar en cuatriciclo por Rocas Coloradas, una zona pesquera de Comodoro Rivadavia, ciudad ubicada al sur de Argentina. Sin embargo nunca regreso.
Ochos días después, tras una intensa búsqueda de las autoridades, comunidad y familiares del trabajador petrolero, sus restos fueron hallados al interior de un tiburón que fue abierto por pesqueros de la zona.
Hoy, mientras continúa la investigación para tratar de determinar qué pasó con Diego Barría, su esposa, Virginia Brugger, quien había estado activa para pedir por la aparición, escribió en sus redes sociales un sentido mensaje para despedirlo. En tanto, desde la provincia de Chubut
despertó sospechas la forma en que encontraron los anteojos del hombre. "No hay que descartar ningún tipo de hipótesis, es un caso complejo desde el inicio", planteó el titular de Defensa Civil de la provincia, José Mazzei.
Junto a una foto de ambos en una fiesta, donde se lo ve al trabajador de la empresa petrolera Vientos del Sur con una camisa blanca a rayas, su pareja escribió: "Mi corazón se fue con vos, te amo para siempre". En lo inmediato, el posteo se llenó de comentarios de apoyo también dirigidos a los hijos que ambos compartían. Unos días atrás, cuando no tenía noticias de su paradero, Brugger había subido fotos de Barría para pedir por datos. "Danos una señal", imploraba sobre su marido, que se perdió el sábado pasado por la noche cuando salió en su cuatriciclo a pasear por la zona de pescadores Rocas Coloradas y nunca volvió.
En un momento en que continúan las muestras de cariño hacia la familia para darles contención en este difícil momento, en Chubut aceleran los peritajes para intentar determinar qué le aconteció al joven. En un primer momento, se encontró el cuatriciclo en el que viajaba con daños en su carrocería y por eso los primeros indicios parecían indicar que había sufrido un accidente con el vehículo. Sin embargo, ahora el expediente está abierto y llamó la atención de los investigadores cómo fueron hallados sus lentes.
"Desde el primer momento el caso fue muy complejo: una desaparición extraña, un accidente en la zona de la costa. Las personas que primero llegan encuentran el cuatriciclo siniestrado, no encuentran el cuerpo y casi nada de sus pertenencias. Así que la dinámica es muy compleja, se están haciendo peritajes, pero va a tener un rol preponderante la investigación”, comenzó a explicar Mazzei en el canal TN.
Entonces, comentó cómo fue que se forjó esa primera hipótesis de que el hombre había sido víctima de un siniestro. "Las mareas suelen configurar de manera muy diferente la costa y el terreno, entonces era probable que hubiera tenido un accidente y quedado inconsciente. Justo esa mañana hubo una marea extraordinaria, con gran oleaje. Entendíamos que por las cercanías del supuesto accidente y la línea de agua, podría haber sido llevado adentro. Las medidas fueron rastrillajes en las zonas costeras para encontrar algún elemento que vinculara que el cuerpo había ingresado al agua", detalló el titular de Defensa Civil de Chubut con respecto a cómo comenzó la causa.
Cuatriciclo de Diego Barría. Créditos: La Nación.
La pista de los anteojos
Sin embargo, y tras el hallazgo de los restos de Brugger en este tiburón que fue abierto por pescadores, la percepción del expediente cambió. "Tuvimos una reunión con la madre [de la víctima] y describía con mucho detalle cómo le había armado la valija para que se fuera al campo. Y en la descripción contaba que Diego tenía anteojos nuevos y que los iba a llevar en un bolsillo. Ella le dijo: 'Llévalos en un estuche'. Era un estuche blanco con rayas negras y ella le tomó los anteojos, los envolvió en un paño color bordó para limpiarlos", comenzó.
Y luego develó: "En uno de los rastrillajes encuentran el paño solo en la playa y, más adelante, el estuche con los anteojos. Hacemos entrega a la Policía y cuando se abre el estuche en presencia de familiares, estaba con los anteojos rotos adentro y faltaba una patilla". En base a esto, Mazzei especuló que "el estuche salió de la mochila y alguien lo abrió", y manifestó: "El estuche con un faltante ya nos infiere que alguna manipulación hubo". De momento, confirmó que la Justicia también intentará determinar si otro vehículo estuvo involucrado en el siniestro.
"Hoy es el noveno día de la desaparición. Teníamos programada una inspección subacuática para ayer, pero el día anterior ocurrió el hallazgo. No hay que descartar ningún tipo de hipótesis. Es un caso complejo desde el inicio. Tenemos situaciones así en la provincia, pero el gobernador nos pidió estar encima porque se vio de entrada que era un caso complejo", sintetizó.
