En uno de sus conocidos lives a través de Instagram, la ex Miss Universo
Cecilia Bolocco, reveló algo que preocupó a sus fans. "No estoy bien de salud, no estoy tan bien, no tengo tan bien las defensas... tengo
neutropenia", dijo la también diseñadora de moda.
Los seguidores y especialmente quienes veían el streaming mostraron inquietud. Sin embargo, Bolocco le bajó el perfil. "A nadie le importa.
A mí tampoco me importa mucho, porque, aunque tengo pocas defensas, no tengo nada de que defenderme", dijo mostrándose optimista. "Estoy bien, le pongo empeño a la vida y estoy contenta, feliz", agregó.
Además, comunicó que está esperando resultados de unos exámenes y que se realizará más: "Me tengo que ir a sacar más sangre, ayer me hice un examen porque yo no tengo defensas, tengo neutropenia severa".
¿Qué es la neutropenia severa?
La condición que padece la ex Miss Universo tiene que ver con un déficit de neutrófilos en la sangre, los cuales son un tipo de glóbulos blancos la mayoría del tipo pasajero. Según comenta a Emol Javier Zelada, hematólogo de Clínica Universidad de los Andes, estos son "el subtipo de glóbulos blancos más frecuentes que hay en la sangre".
Generalmente esta condición es pasajera. No obstante, "cuando es mayor a siete días es una neutropenia prolongada la cual obliga a mantener al paciente hospitalizado en aislamiento para evitar que se agarren infecciones", dice el profesional de la salud. Además, agrega que generalmente la neutropenia es "signo, consecuencia o manifestación de otras enfermedades".
En ese sentido habría muchas causas. Una de las principales causas de esta condición es la quimio o radioterapia a la cual se someten los pacientes con cáncer. Esto debido a que ese tratamiento ataca distintos tipos de células del cuerpo, incluyendo muchas veces las que son útiles, como los neutrófilos.
También puede surgir por ingerir ciertos medicamentos como los usados para tratar la tiroides hiperactiva, ciertos antibióticos como vancomicina, penicilina G y oxacilina, antivirales como ganciclovir y valganciclovir, antiinflamatorios como sulfasalazina e incluso algunos antipsicóticos, como clozapina y clorpromazina.
Asimismo, puede ocurrir por trastornos en la médula ósea -donde se producen los neutrófilos- como la anemia aplásica, síndromes mielodisplásicos o mielofibrosis.
"El tratamiento depende de la enfermedad de base que lo genera, esa es la premisa más importante"
Javier Zelada
Es difícil identificar superficialmente si la sangre está con déficit de neutrófilos ya que no genera síntomas obvios. Sin embargo, estos serían fiebre mayor de 38 grados, escalofríos y sudor, tos nueva o que empeora, falta de aliento, alguna herida en la boca, dolor de garganta, cualquier cambio al orinar, cuello rígido, diarrea, vómitos, enrojecimiento o hinchazón alrededor de cualquier área donde hay un corte o desgarro en la piel, una nueva secreción vaginal o un dolor nuevo.
La condición generalmente se descubre cuando se realizan análisis de sangre por otros motivos. Para confirmar el diagnóstico, generalmente hay que repetir el examen debido a la fluctuación que tienen los glóbulos blancos en nuestra sangre con solo horas de diferencia.
Según explica el doctor Zelada, "el tratamiento depende de la enfermedad de base que lo genera, esa es la premisa más importante". Por ejemplo, generalmente luego de una quimioterapia "uno tiene posibilidad de utilizar estimuladores de la médula que hacen que los neutrófilos maduren más rápido".