Shani Louk estaba en el festival donde irrumpieron miembros del grupo islámico.
La Nación/GDA
Las imágenes del
cuerpo inconsciente, ensangrentado y semidesnudo de la joven alemana de 22 años Shani Louk en el pick up de una camioneta repleta de miembros de Hamás, impactaron al mundo luego de que se viralizaran por redes sociales durante el fin de semana, horas después de que el grupo islamista atacara por sorpresa a Israel.
Louk formaba parte de los
3.000 jóvenes israelíes que bailaban al ritmo de música electrónica en el festival que se celebró en el desierto, la madrugada del sábado, cuando milicianos de Hamás irrumpieron armados hasta los dientes.
Asesinaron a 260 personas y secuestraron a varios más, en el que es el
episodio más sangriento de esta nueva guerra.
Shani Louk lleva desaparecida desde el atentado contra el festival de música. El video que recorrió y conmocionó al mundo
hizo creer que estaba muerta e incluso algunos medios dijeron que había fallecido.
Sin embargo,
no es así. "Shani está viva, pero se encuentra en situación crítica", señaló Ricarda Louk, la madre de la joven, al diario Bild. Según el mismo medio, fuentes palestinas dijeron a sus familiares que Shani se
encuentra en un hospital controlado por Hamás.
Cada minuto es crítico
Según Ricarda, su hija
está internada en un hospital de la Franja de Gaza con una grave herida en la cabeza. "Cada minuto es crítico", subrayó la madre, quien pidió al gobierno alemán que la ayude con urgencia.
"Este es realmente mi llamado desesperado a todo el país,
a Alemania, para que me ayuden a traer a mi Shani de vuelta a casa, sana y salva", dijo.
La joven tiene nacionalidad alemana e israelí, pero la súplica de su madre va al gobierno de Berlín. "No deberíamos discutir ahora sobre cuestiones jurisdiccionales", sostuvo.
Toda la familia de Shani pidió ayuda con urgencia. Incluso su tía, Orly Louk, desde Sulz am Neckar, en Alemania indicó: "
La responsabilidad recae en el gobierno alemán, que debe enviar a alguien y
liberar a mi sobrina de este horror", y añadió que la situación en Israel no es buena. "
Aquí no estamos recibiendo ninguna información, solo de los videos", agregó.
Cuando la grabación empezó a circular y la familia de Shani la vio por primera vez, algo extraño sucedió:
Ricarda Louk recibió por correo electrónico una
alerta de uso de la tarjeta de crédito que llevaba su hija, es decir que alguien la estaba usando. El banco emisor no informó de cargos,
pero advirtió que había sido usada en una tienda frente al "Hospital Indonesio", el más importante de Gaza. Esto le dio esperanza a la familia Louk, que ahora se encuentra un poco más tranquila porque su Shani apareció con vida.