Tomar sol, para muchos es una de las actividades favoritas del verano. Además, de que se busca broncearse para adquirir un color más bonito, la luz solar también tiene beneficios para nuestra salud. De hecho nos entrega la vitamina D, que nuestro organismo no es capaz de producir. Sin embargo, exponerse de forma excesiva y sin protección puede ser muy perjudicial, ya que incluso se podría desarrollar un cáncer de piel.
Este según la
Fundación Arturo López Pérez (FALP) se define como el
crecimiento anormal de las células de la piel, debido principalmente a la exposición de los rayos ultravioleta (UV). Por esto, una de las cosas más fundamentales de la época de verano es cuidarse en mayor medida de los rayos UVA, UVB, IR y la luz visible.
Según datos entregados por la FALP, en la última década los casos de esta patología aumentaron en un 60%, y anualmente más de 500 personas fallecen por esta enfermedad en Chile. Además, 9 de cada 10 diagnósticos, tiene como principal responsable la exposición a la radiación UV del sol. A estos lamentables números, se agrega que a diciembre de 2023 se registraron más de 560 muertes por el cáncer de piel, siendo la cifra más alta de los últimos 21 años, según el Departamento de Estadísticas e Información de Salud (DEIS), del Ministerio de Salud.
"Olvidamos que al exponernos a la radiación UV solar, como también de solárium, estamos favoreciendo el envejecimiento prematuro y aumentando los riesgos de desarrollar cáncer de piel, ya sea del tipo no melanoma (carcinoma basocelular y carcinoma de células escamosas) o melanoma. Este último es el más agresivo y potencialmente mortal", señaló el doctor Leonardo Peruilh, dermato-oncólogo de FALP.
"Olvidamos que al exponernos a la radiación UV solar, como también de solárium, estamos (...) aumentando los riesgos de desarrollar cáncer de piel, ya sea del tipo no melanoma (carcinoma basocelular y carcinoma de células escamosas) o melanoma. Este último es el más agresivo y potencialmente mortal".
doctor Leonardo Peruilh, dermato-oncólogo de FALP
Ante esta compleja situación, es importante destacar que a pesar de que esta patología se puede curar cuando es detectada a tiempo
, se puede prevenir. Y una de las medidas más
importantes es aplicar correctamente el protector solar al menos tres veces al día y durante todo el año.
Por todo lo anterior, la FALP lanzó una campaña educativa, con el apoyo del Ministerio de Salud, llamada "Protégete de lo que no ves. Prevenir el cáncer de piel, cuanto antes mejor", que busca concientizar sobre la importancia de la prevención y, al mismo tiempo, promover conductas de autocuidado desde la infancia.
La instancia estará presente en distintos puntos a lo largo de Chile, a través de cines, transporte, vía pública, y también en redes sociales, y cobra mayor relevancia ante las altas temperaturas y elevados niveles de radiación registrados a lo largo del país.
"La fotoprotección constante puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer de piel no melanoma en aproximadamente un 40%, y en un 50% el del tipo melanoma".
doctor Leonardo Peruilh, dermato-oncólogo de FALP
"Promover y reforzar transversalmente en la comunidad la adhesión a conductas saludables y responsables del cuidado de nuestra piel es prioritario. La
fotoprotección constante puede reducir el riesgo de desarrollar cáncer de piel no melanoma en aproximadamente un 40%, y en un 50% el del tipo melanoma", agregó el especialista.
¿Cómo cuidar la piel?
Según la FALP es fundamental usar de forma diaria un protector solar de amplio espectro y aplicarlo tres veces al día. Pero en caso de que estés en exposición directa al sol, la misma institución recomienda aplicarlo cada 2 horas e inmediatamente al salir del agua.
Asimismo es importante
evitar la estar frente a la luz solar en los horarios de mayor riesgo, es decir,
entre las 11.00 y 16.30 horas, y también es relevante incorporar ropa y elemento de protección cada vez que se está al aire libre. Esto último, es fundamental en aquellos trabajos y/o disciplinas deportivas que se realizan al exterior. Por ejemplo, agricultura, construcción, pesca, atletismo y fútbol, entre otros.
Además de estas medidas, expertos de la Clínica Indisa entregaron recomendaciones sobre cuáles son las mejores opciones para cuidar la piel durante el verano.
En primer lugar, la dermatóloga Claudia Moreno explicó cuál es la diferencia entre protectores solares de niños y adultos. "Los fotoprotectores de niños están hechos para proteger la pieles más delgadas y sensibles, por lo tanto es más intensa la protección y son más densos", señaló. "Los de adulto, por otro lado, pueden tener componentes más hidratantes y diferentes propiedades y texturas, según lo que le acomode a la persona", agregó.
Por su parte, el dermatólogo Felipe Parada, explicó de qué se trata el FPS (Factor de Protección Solar) y dijo que "es una escala para medir el nivel de protección de radiación UVB, que es la más cancerígena". En relación a esto, dio a conocer cual es la diferencia entre el bloqueador 30 y uno 50. "El FPS 50 significa que la persona que se expone al sol con una buena cantidad de protector solar va a necesitar 50 veces más de tiempo para llegar al color rojo que daña la piel. Por tanto, se recomienda que el protector solar tenga un FPS mayor o igual a 50".
Asimismo, el mismo especialista recomendó aplicar el bloqueador cada 2-3 horas e indicó que "
en la cara se deben aplicar dos dedos, lo que es equivalente a una cucharadita de té", indicó.
En relación a las personas que trabajan en oficina y no están directamente expuestos al sol, la doctora Claudia Moreno sugirió aplicar bloqueador tres veces al día (mañana- mediodía- tarde). Por el contrario, si se está afuera, ella dijo que se debe utilizar un protector para niños cada dos horas.
Con respecto a la protección en niños menores de dos años, Moreno explicó que "desde el nacimiento hasta los 6 meses se recomienda utilizar fotoprotección física sin aplicar filtros solares, como gorros, ropa y sombrillas. Desde los 6 meses y hasta los 2 años se pueden utilizar filtros solares de micropigmento que contienen filtro físico, o también pantallas solares que protegen la piel de los niños y evitan la absorción. Sobre los 2 años se pueden utilizar filtros solares de niños, que incluyen filtros químicos y físicos en su fórmula".
Cabe destacar que ningún experto recomendó el uso de bronceador. "Si se desea lograr un color más dorado en la piel, se pueden utilizar productos autobronceantes que dejan un color en la piel y no tienen los riesgos de la exposición directa al sol. De todas formas, si se va a aplicar luego de aplicar el producto, se debe colocar un filtro solar para salir al exterior", agregó Moreno.
