WAVRE, Bélgica.- El optimismo y la felicidad son las notas predominantes en la concentración de Francia después de su contundente triunfo contra Dinamarca (3-0) en su primer partido de la Eurocopa e incluso los jugadores ya hablan de aspirar al "doblete" tras conseguir el título mundial hace dos años.
El lateral zurdo del Bayern Múnich Bixente Lizarazu comentó que "algunas selecciones parecen cansadas después de ganar un gran trofeo, pero ése no es el caso de Francia".
"Tenemos en la plantilla tantos jugadores que han sido campeones mundiales que es una gran ventaja desde el punto de vista de la experiencia", agregó el jugador vasco-francés.
No en vano, en la alineación inicial de Roger Lemerre contra Dinamarca había diez jugadores que comenzaron el Mundial frente a Sudáfrica, con el mismo marcador de 3-0. El único cambio fue la entrada del delantero Nicolás Anelka en lugar de Stephane Guivarc'h.
"Tenemos más hambre de triunfos y queremos lograr un fantástico doblete", dijo Lizarazu, quien apuntó que quieren ser los primeros en lograr el triunfo en la Eurocopa después de haber ganado el Mundial.
Lemerre mostró también su satisfacción por el juego y el trabajo del equipo. "La labor dentro del sistema se ha desarrollado perfectamente. Los jugadores han sabido aguantar bien la presión durante los dos últimos años", afirmó el técnico, quien insistió en que aún quedan dos encuentros difíciles en esta primera fase.
