ROMA.- Inter de Milán y Parma se repartieron los puntos (1-1), en el partido nocturno que supuso la vuelta de Arrigo Sacchi a los banquillos y que cierra la decimocuarta jornada de la Primera División italiana de fútbol.
La vuelta de Sacchi al banquillo de un Parma que le relanzó hace catorce años fue, curiosamente, en un estadio milanés ''Giuseppe Meazza'' donde fraguó su gran fama internacional como entrenador del Milán, y ante un Inter ante el que debutó como técnico profesional, dirigiendo entonces al Rimini, el 20 de agosto de 1982.
Las cosas le fueron relativamente bien al técnico nacido en Fusignano, pues el Parma, que llegaba con una negativa serie de un punto en los últimos cuatro encuentros, consiguió un valioso empate y estuvo muy cerca del triunfo. Pero lo más importante es que el equipo parmesano evidenció una notable mejoría táctica.
El partido resultó combativo y equilibrado, pero no espectacular. Estuvo caracterizado por una fuerte lucha en el centro del campo, donde no se cedían metros al rival ni tampoco se concedían apenas ocasiones para que los delanteros de ambos equipos pusieran en apuros la respectiva meta adversaria. Así, la primera media hora transcurrió sin apenas remates entre los palos.
Sería en el minuto 31, a la salida de un saque de esquina, realizado en corto por el brasileño Marcio Amoruso sobre el portugués Sergio Conceicao, cuando logró adelantarse el Parma. El centro del luso fue rematado de cabeza suavemente por Marco Di Vaio, sin que el meta francés Sebastian Frey pudiera evitar el tanto.
El Inter de Milán había pagado un claro despiste defensivo y ya veía como el partido se le ponía muy ''cuesta arriba''. Un equipo interista que pese a tener más tiempo el balón, con un español Francisco Javier Farinós entonado pero poco apoyado, no lograba eludir las líneas de un Parma bien conjuntado entre líneas y que, además, se mostraba peligroso al contragolpe.
Pudo, no obstante, el Inter igualar antes del descanso, pero Christian Vieri evidenció seguir con su negro periodo ante la portería rival. Fue, en el minuto 42, cuando el delantero interista vio como el meta parmesano Gianluigi Buffon le desviaba un claro remate.
El Parma, con un excelente trabajo del argentino Matías Almeyda en el centro del campo, se iba al descanso en ventaja y merced a haber aprovechado, prácticamente, su única oportunidad.
La segunda mitad comenzó con un Parma dominador, que movía el balón con criterio, sin apenas errores en la entrega y que, materialmente, volvía loco a un perdido Inter. El técnico interista Marco Tardelli intentó cambiar el rumbo de su equipo, dando entrada al uruguayo Alvaro Recoba en lugar de un apagado holandés Clarence Seedorf (m.56), lo que el equipo agradeció.
Poco después volvió Vieri (m.63) a desaprovechar una clara ocasión. Pero a la tercera fue la vencida y el ex delantero del Atlético de Madrid, por fin, rompió su ''mal fario'' y logró batir la meta de Buffon (m.69), llevar el empate al marcador y elevar las esperanzas de su equipo.
El Parma acusó el golpe y perdió su tranquilidad y buen estar. Ahora, el Inter controlaba, dominaba y llegaba con peligro al área visitante. Pudo llegar el gol por una y otra parte. Al final todo se quedó en un reparto de puntos que, en la clasificación, no viene bien a ninguno, pero que sí deja indemne la vuelta de Sacchi a los banquillos.