MOSCU.- La selección española de fútbol sala, tres meses después de hacer realidad el sueño de ganar la corona mundial, consiguió una complicada victoria sobre Ucrania en la final del Campeonato de Europa de Moscú 2001 (2-1) y añadió otro título a su colección.
El equipo que dirige Javier Lozano, hasta hace poco tiempo condenado a vivir a la sombra de Brasil, se libró de esa penitencia en Guatemala y esta tarde, en el pabellón Luzhniki de Moscú, hizo honor a su condición de favorito y confirmó su grandeza.
La victoria española, sin embargo, no fue fácil y no se concretó hasta el minuto 4 de la prórroga, con un 'gol de oro' de Javi Sánchez.
Ucrania, como se preveía, plantó cara a los campeones del mundo con una táctica simple pero complicada de contrarrestar. El equipo de Gennady Lissenchuk construyó una muralla a doce metros de su portería con mucha disciplina y cedió terreno a España para intentar hacerle daño de contra.
La paciencia y circulaciones rápidas del balón son las principales arma para doblegar a un equipo que apuesta por ese tipo de juego. Los hombres de Lozano hicieron bien una cosa, no jugaron acelerados, pero no imprimieron a sus acciones la rapidez suficiente y eso facilitó el trabajo defensivo de los ucranianos, que consiguieron llegar al descanso con el 0-0 inicial.
El equipo español tampoco pudo jugar mucho con el pívot, pese a que Lozano dio minutos de juego en la primera parte a los tres que ha convocado para este torneo, Javi Sánchez, Paulo Roberto y Javi Rodríguez, y los campeones del mundo apenas dispusieron de ocasiones claras de gol en la primera mitad.
La mejor, en el minuto 11, fue un disparo de 'chilena' de Paulo Roberto que se estrelló en un poste de la portería de Korneyev, pero los ucranianos también pudieron marcar por medio de Kosenko, que no supo resolver un mano a mano con el arquero Luis Amado en el minuto 16.
En el arranque de la segunda mitad todo siguió igual. España dominaba y Ucrania, agazapada en su terreno a la espera de un error del rival para lanzar sus rápidos contragolpes.
El guión del partido cambió en el minuto 26. En una jugada sin aparente peligro, Melnikov disparó a unos quince metros de la portería española con la fortuna de que el balón tocó en Orol y varió su trayectoria. Luis Amado no pudo hacer nada para evitar el tanto ucraniano.
España anduvo un par de minutos desorientada y apunto estuvo de recibir un nuevo gol en el minuto 28, cuando Koridze conectó un disparo raso y cruzado que dio en un poste de la portería de Amado.
El equipo de Javier Lozano se repuso de inmediato y acorraló a Ucrania. Sólo le quedaban doce minutos para contrarrestar su desventaja y se volcó sobre el área rival. El premio a su tesón y a su dominio llegó en el minuto 32, cuando Alberto Riquer firmó el tanto del empate tras hacer la pared con Javier Orol.
Ucrania, sin variar un ápice su planteamiento, aguantó el acoso español hasta el final de los cuarenta minutos reglamentarios y fue en el minuto 4 de la prórroga cuando el partido se resolvió a favor de España.
Javi Sánchez, dentro del área y tras un saque de banda de Julio, batió a Korneyev y su 'gol de oro' dio el título al equipo que más lo buscó.
La selección española se sacó así la espina que tenía clavada desde el 28 de febrero de 1999, hace justo dos años, cuando Rusia la derrotó en Granada de la forma más dolorosa, por penaltis, en la final de la anterior edición del Campeonato de Europa.
ESPAÑA: Luis Amado, Julio, Orol, Daniel, Javi Sánchez -equipo inicial-, Adeva, Javi Rodríguez, Paulo Roberto, Kike y Riquer.
UCRANIA: Korneyev, Mansurov, Kosenko, Moskvyshov, Shaytanov -equipo inicial-, Koridze, Bezugly, Melnikov y Pylypiv.
