SEPANG, Malasia.- El piloto brasileño de Ferrari, Rubens Barrichello, reza para que llueva el domingo, fecha en que se disputará el Gran Premio de Malasia de Fórmula 1.
"Me gusta improvisar, hacer cosas de forma refleja, y esto es lo que se hace cuando llueva", afirmó este jueves el brasileño. "En la carretera hacia Kuala Lumpur, ayer, llovía muy fuerte. Adelanté a tres o cuatro coches en el camino hacia el hotel, por lo que me siento muy confiado sobre mi actuación con el suelo mojado", explicó en una rueda de prensa.
Las tormentas son habituales en Malasia en esta época del año, por lo que los deseos de Barrichello podrían hacerse realidad.
El brasileño terminó en tercera posición en Sepang el año pasado y quiere hacerlo mejor en esta ocasión.
"Ferrari siempre lo hace bien en Malasia. Hemos ganado las dos últimas carreras y espero que podamos mantener esta tónica, y si puede ser que sea yo el vencedor. Es un gran desafío por el calor y para el coche", indicó.
Barrichello, 28 años, terminó en cuarta posición el año pasado en el Mundial de pilotos, detrás de Schumacher y los dos conductores de McLaren-Mercedes, Mika Hakkinen y David Coulthard.
En el primer gran premio de la temporada, en Melbourne, terminó en tercera posición, detrás de su compañero Michael Schumacher y Coulthard.
Barrichello añadió que ha estado trabajando duro en Europa desde la carrera de Australia. "Ferrari está siempre innovando. La primera carrera fue muy apretada, y pensamos que el auto todavía pudo dar más de sí, y siempre hay cosas que queremos probar".
Barrichello, en palabras a la agencia Bernama, afirmó que estaba encantado con la actuación del auto en Melbourne. "Este es el mejor Ferrari que he conducido. Tuve la suerte de manejar el de 1999 un poco y después tuve el del año pasado, pero éste es el mejor", explicó.