MILAN, Italia.- El fiscal del Tribunal de Disciplina de la Federación Italiana de Fútbol (FIGC) pedirá de tres meses a un año de suspensión para los jugadores involucrados en el escándalo de los pasaportes falsos.
El pedido trascendió en medio de una situación signada por la confusión que marcó hoy la apertura del proceso que, según todos creen, derivará en sanciones deportivas para clubes y jugadores involucrados.
Asimismo, el fiscal Carlo Porceddu se orientaría a solicitar penalizaciones de dos a ocho puntos, a quitarse ya en el actual campeonato, contra los clubes implicados, de los cuales los mayores riesgos los corren Inter, Udinese y Sampdoria.
De los jugadores acusados, ninguno de los cuales se hizo presente hoy en el aula del debate, el más importante es el internacional uruguayo Alvaro Recoba, a quienes se suman, entre otros, los brasileños Alberto, Warley, Jorginho, Dida, Jeda y Dedé.
En la apertura del proceso, Franco Coppi, defensor de Udinese y Vicenza pero en nombre de todos los acusados, pidió una postergación general del caso, en espera de un veredicto definitivo de la justicia penal, al que adhirió el club Inter, al principio orientado de manera diversa.
"Se trata de un proceso inexplicable, pues se está discutiendo por los daños causados por una norma racista, como es la de limitar el número de jugadores extracomunitarios que cada equipo puede alistar", sostuvo el defensor del Inter, Giuseppe Prisco.
Los clubes citan cuatro fallos judiciales que rechazan la reglamentación de los cupos para jugadores extracomunitarios al considerarlos inconstitucionales.
El Tribunal de Disciplina congeló el pedido, el cual, según el fiscal Carlo Porceddu, debería ser rechazado. El Tribunal sí aceptó en cambio una postergación exclusivamente del caso Sampdoria hasta el 3 de mayo, en razón de un vicio de forma en la comunicación oficial.
El proceso continuará mañana y presumiblemente el miércoles, y, a pesar de que el debate se realizó a puertas cerradas y sin acceso de periodistas, se da como seguro que la tesis de la postergación, presentada por los defensores de los imputados, difícilmente será acogida.
El proceso que afecta en cambio a tres jugadores juveniles y cuatro dirigentes de Sampdoria fue aplazado en cambio para el 3 de mayo por la falta de notificación a uno de los inculpados, el ex director general del club, Emiliano Salvarezza.
Los futbolistas inmersos en este proceso y que están acusados de "deslealtad deportiva" por utilizar supuestamente un pasaporte comunitario falso son, además de Recoba, los brasileños Nelson De Jesús Silva "Dida" (Milán), Tiago Henrique (Inter de Milán), Alberto, Warley y Jorginho (Udinese) y Jedaias Capucho Neves "Jeda" y Dedé (Vicenza), además del paraguayo del Udinese, Da Silva.
A ellos se suman algunos juveniles, como Mekongo Ondoa, de Cabo Verde, y los camboyanos Francis Zé y Thomas Job, todos ellos del Sampdoria.