BARCELONA.- El tenista Nicolás Massú reconoce que su gran virtud es no dar un punto por perdido, como demostró en el torneo de tenis de Barcelona, y que para vencerle sólo hay que jugar mejor que él.
Su eliminación este jueves del torneo Conde de Godó, a manos del español Alex Corretja, no fue fácil: "Yo estaba motivadísimo, quería ganar a un jugador de su trayectoria", dijo el chileno, 68° en la ATP.
"Jugar con tenistas como Corretja es lo que me permite progresar", dijo tras perder en octavos de final con el español, décimo en el ranking mundial.
Massú no estaba contento: "Jugué muy mal, tengo semanas muy buenas, llego a una final pero luego pierdo seis veces seguidas en primera ronda", se lamentó recordando su final del torneo de Adelaida contra el alemán Tommy Haas, y la racha de eliminaciones que sufrió en los seis torneos que jugó a continuación.
"No aprovecho todas las semanas de la temporada", apuntó Massú, quien se muestra cansado y con ganas de volver a casa a descansar y visitar a sus médicos: "Ahora jugaré el torneo de Mallorca y quiero regresar a Chile lo antes posible para tratarme los aductores y la espalda".
"Llevo varias semanas con molestias en los aductores", dice, "y cada vez que creo que ya han desaparecido, regresan", continúa, restándole importancia: "Quiero conocer la opinión de mis médicos".
"Pero si en Mallorca paso las primeras rondas tal vez vaya a Roma", agregó un Massú ávido de juego. "Donde seguro que estaré será en Sankt Polten", torneo que se juega en Austria a partir del 20 de mayo.
Sobre el enfrentamiento que Chile mantendrá con Eslovaquia para optar al ascenso del Grupo Mundial de la Copa Davis, el próximo septiembre, Massú es muy claro: "Es uno de los equipos más duros" que le podía tocar a Chile. "Pero estamos muy igualados, Marcelo (Ríos) con (Dominik) Hrbaty, y (Karol) Kucera conmigo", declaró, aunque agregó que Eslovaquia "tiene más chance por ser locales".