SANTIAGO.- El portero chileno Roberto "Cóndor" Rojas aseguró hoy estar "muy contento" por la decisión de la FIFA de levantarle un castigo de por vida que le afectaba desde 1989 y consideró esta amnistía como una "reivindicación moral y familiar".
"Estoy muy contento y es una muy buena noticia la que he recibido esta mañana a través de la prensa. Ahora hay que esperar que se haga en forma oficial, a través del Sindicato de Futbolistas de Chile (Sifup)", afirmó en declaraciones a la Radio Cooperativa.
El ex seleccionado chileno dijo que aún no ha sido notificado de manera oficial de la resolución, la cual deberá ser informada por la FIFA primero al presidente del Sifup, Carlos Soto, que hizo la presentación en su favor en enero pasado.
"Es una reivindicación personal y familiar. El camino que seguimos en enero, cuando tuve la reunión con Carlos Soto, fue más una reivindicación moral, porque sería una locura hacer una petición de reivindicación laboral", sostuvo.
Rojas descartó de plano volver a jugar profesionalmente y dijo estar feliz con su trabajo de entrenador de guardametas en Sao Paulo, Brasil.
Además, agradeció a su familia, que le "tendió una mano de solidaridad" cuando lo necesitó, porque "aparte del error de una persona, ellos fueron solidarios de forma incondicional", destacó.
Consultado sobre lo que ocurrió hace doce años en el estadio Maracaná, Rojas manifestó: "Ya pagué por lo que hice. La idea de forjar la lesión fue mía, pero no fui yo quien decidió sacar el equipo de la cancha. Eso fue una determinación de los directores. Cada uno tiene su parcela de responsabilidad".
"Claro que me arrepiento. Todo mundo falla y creo que la virtud está en asumir los errores y no apenas disculparse. No fui el único responsable por el episodio y, sin embargo, fui el único que asumió la culpa", dijo con voz entrecortada.
