BERLIN.- La tenista francesa Amelie Mauresmo venció el sábado a la número uno mundial Martina Hingis, de Suiza, por 3-6, 6-0 y 6-4 para alcanzar la final del Abierto de Alemania que disputará a la estadounidense Jennifer Capriati.
La cuarta preclasificada Mauresmo, que vio su serie de 14 victorias consecutivas terminada cuando Hingis la venció el pasado mes en Charleston, Carolina del Sur, jugó a la perfección su segundo set tras haber perdido el primero.
La tenista gala de 21 años que saltó a la fama en Berlin en 1998 tras llegar a la final sin haber sido preclasificada, sirvió con fuerza, devolvió con potencia y logró puntos constantes para reducir a una impotente Hingis, sin dejarle ganar un solo game, en el segundo set.
Hingis pareció responder en el set decisivo, pero tuvo que rendirse ante la potencia de su adversaria hasta que finalmente estrelló en la red el primer punto de set y de partido a que se llegó.
Capriati clasificó a la final del Abierto Alemán después que la belga Justine Henin se retiró el sábado por lesión del partido que disputaban en semifinales.
Capriati, campeona del Abierto Australiano, había ganado el primer set 6-2, pero Henin igualó la cuenta en el segundo tras imponerse 6-4.
Henin, la promisoria adolescente de 18 años que derrotó a la número dos del mundo Venus Williams en tercera ronda, perdía 2-1 en el tercer set y estaba en el servicio cuando se torció el tobillo derecho y cayó al piso.
Con el tobillo vendado reanudó el encuentro, pero no podía soportar el dolor y abandonó después de haber disputado apenas un punto.
"No estoy satisfecha de ganar un partido de esta forma", dijo Capriati. "Uno siempre quiere ganar de buena manera. Quién sabe lo que va a ocurrir. Ahora tengo que olvidarme de esto y prepararme para mi próximo partido", comentó la estadounidense.
La tenista de 25 años ya había jugado su primera semifinal en el evento alemán hace una década.
Su promisoria carrera se truncó después al perder interés en el tenis y verse involucrada en consumo de drogas, pero ha logrado recuperarse y volver a la elite mundial de ese deporte.
Desde que ganó el primer Grand Slam del año en enero en Melbourne, Australia, su juego ha ido en ascenso y parece encaminarse a la máxima posición, que ahora ostenta Hingis.
