ZURICH.- La quiebra del número 1 del marketing del deporte, el grupo suizo ISMM-ISL, podría costarle más de 600 millones de dólares a la Federación Internacional del Fútbol (FIFA), uno de los asociados privilegiados, estimó este miércoles Josef Blatter, presidente de la FIFA.
En una entrevista publicada por el diario suizo-alemán Blick, Blatter indicó que "la cifra de unos 230 millones de dólares anunciada anteriormente" será superada. "En el peor de los casos podría ser superior a los 600 millones de dólares", dijo.
Blatter evocó igualmente la posibilidad de presentar una querella contra ISMM-ISL, si se comprueba que el dinero que la FIFA debía recuperar por la venta de los derechos fue objeto de una malversación de fondos.
"Si ese es el caso, se trata de un acto criminal, y no hay otra palabra para decirlo", declaró Blatter, agregando que cualquiera sea el responsable, principalmente el patrón de ISMM-ISL, el francés Jean Marie Weber, "una querella será presentada".
Blatter, por otra parte, señaló no estar al corriente de las cajas negras alimentadas por ISMM-ISL destinadas a pagar coimas a funcionarios del deporte. "Por el contrario, busco esas famosas 'cajas negras' en las cuales desapareció el dinero entregado por los patrocinadores de nuestro campeonato del mundo", agregó.
Por último, Blatter rechazó enérgicamente las acusaciones de corrupción lanzadas el pasado fin de semana por la prensa alemana. Siempre según esa prensa, Josef Blatter, al igual que el presidente del Comité Olímpico Internaciona, (COI), Juan Antonio Samaranch, habrían cobrado coimas, obtenidas de una cuenta secreta de ISL en Liechtenstein, llamada "Nunca", en la cual 23 millones de dólares fueron depositados, según fuentes de ISL que pidieron conservar el anonimato.
El grupo ISL-ISMM fue declarado en bancarrota el lunes por el tribunal cantonal de Zoug.
