SANTIAGO.- "Trabajo duro, pero no sé qué pasa". Aunque la frase sonó a explicación sobre el discreto desempeño que acababa de tener en la pista de Roland Garros, donde había quedado eliminado por un desconocido en segunda ronda, Marcelo Ríos no estaba hablando de tenis sino de su físico.
Después de 18 meses de la operación a los aductores, el tenista número uno de Chile sigue con molestias en la zona operada, al punto que su preparador físico, Carlos Cardemil, ya lo espera de regreso a Chile para evaluarlo a través de una serie de exámenes que debería realizarse la próxima semana.
"No sé si Marcelo (Ríos) tuvo una buena pretemporada, o si esto es una secuela, pero el hecho de partir el año ganando en Doha hace suponer que hizo un trabajo adecuado. Sin embargo, seguir con las molestias en el muslo y la cadera izquierdas me dice que necesita parar para hacer un plan físico sin la presión de los partidos", aclara el preparador.
Para Cardemil, el problema del tenista es global, "porque la molestia lo afecta en su juego y eso a la vez ataca lo mental. Ríos no puede recuperarse entre partidos, necesita que lo evaluemos nuevamente (ya había sido analizado previo a la Copa Davis frente a Bahamas en abril pasado) y que verifiquemos la gravedad de la lesión".
El preparador asegura que Ríos logrará la recuperación total, "pero para eso necesita un trabajo específico para la zona afectada. Yo considero que con seis semanas él debería ya estar en condiciones de mejorarse".
A fines del año pasado, Marcelo Ríos dijo que, después de Roland Garros, revisaría el calendario para ver si jugaba o no la tamporada en pasto, que comienza el 11 de junio en Queen's y culmina con Wimbledon el 9 de julio. Todas las luces dadas por el chileno alumbran que el segundo semestre lo iniciará en la arcilla de Gstaad, el 9 de julio, exactamente cuarenta días después de ser eliminado, ayer, en el torneo de París. Cuarenta días, casi, casi las seis semanas que pide Cardemil.
"Después de ese trabajo hay que seguir viendo la evolución. Así, a primeras porque ni siquiera he podido hablar con él, creo que no es necesario volver a operarlo. En todo caso, voy a conversar con los cirujanos que lo intervinieron para hacerme un panorama más completo", dice.