ROMA.- El consejo directivo de la Federación Italiana de Ciclismo ha decidido la suspensión temporal de la actividad profesional de este deporte en Italia a partir del próximo lunes, según ha informado tras una reunión en Roma.
Esta suspensión se mantendrá hasta que una comisión, guiada por Alfredo Martini, ex seleccionador nacional y presidente honorario de la Federación, no haya definido un código de comportamiento ético para acabar con el dopaje en el ciclismo italiano.
Este consejo ha recogido así la invitación realizada ayer por el Comité Nacional Olímpico Italiano (CONI) tras el registro policial realizado la pasada semana en la caravana del Giro de Italia y en el que se descubrieron numerosas sustancias susceptibles de ser utilizadas para el dopaje.
La suspensión afectará a todas las categorías, tanto las de competición como las de aficionados, que se celebren en Italia, por lo que no impide a los corredores italianos participar en pruebas que tengan lugar en otros países.
Entre las competiciones italianas que la suspensión ha puesto en peligro se encuentran el campeonato en carretera de finales de junio que se debía de celebrar en Brianza.
La comisión encargada de elaborar el código ético estará además coordinada por el presidente del consejo del ciclismo profesional, Sergio Fusaro, y tendrá como miembros, entre otros, al corredor Mario Cipollini, además de representantes de los diferentes equipos deportivos.
La creación de este código ético sobre el problema del dopaje, que los corredores se comprometan en respetar, era una de los principales acuerdos tomado ayer por los miembros del CONI.
El consejo directivo del ciclismo ha solicitado además a las autoridades sanitarias italianas que efectúen controles más severos y por sorpresa en el futuro, siguiendo el protocolo australiano para detectar la existencia de EPO.
Igualmente sus responsables se han comprometido a definir en el plazo más breve posible la reglamentación para el paso de los corredores a la categoría profesional.
Según el presidente de la federación, Giancarlo Ceruti, la medida pretende que el ciclismo italiano "vuelva a ser un deporte sin zonas oscuras".
La federación ha expresado igualmente su convicción de luchar contra el dopaje y en la necesidad de un "cambio de 180 grados" en el ciclismo para que "recupere la sintonía con las reglas morales que se encuentran en la base de todo deporte".