KATOWICE, Polonia.- Italia disputará por décima vez la final de la Liga Mundial de véleibol, torneo que ya ha ganado en ocho ocasiones, tras eliminar a Yugoslavia, actual campeón olímpico que desperdició una ventaja de dos sets.
El equipo italiano inició el partido con enorme nerviosismo. Yugoslavia no sólo les infligió una severa derrota (3-0) en los Juegos Olímpicos de Sydney sino que les privó luchar por el oro.
Ante un adversario abatido, los balcánicos ofrecieron un enorme aplomo. Sólo Leondino Giombini logró hostigar, aunque de un modo esporádico, a sus rivales.
Los italianos aprovecharon unos breves momentos de relajación de sus contrincantes para recortar su desventaja en los sets iniciales.
Tras un descanso de diez minutos (sólo utilizado en partidos de Liga Mundial por exigencias publicitarias de las cadenas de televisión), Italia parecía haberse recuperado.
La garra de los italianos, una selección que prácticamente ha ganado todos los títulos en la última década, salió a relucir. Con un alto nivel de juego, ambos equipos ofrecieron un mejor espectáculo. Italia marcó el ritmo, pero Yugoslavia no tardaba en darle réplica.
Los balcánicos pasaron momentos delicados (18-21). Su seleccionador Zoran Gajic tuvo que recurrir a Nikola Gbric, con problemas en su tobillo derecho. Italia no dejó escapar su gran oportunidad (22-25). La "muerte súbita", el set más temible, determinó que Italia se clasificase para la gran final.
ALINEACIONES
Yugoslavia: Jokanovic, Boskan, Geric, Vujevic, Miljkovic, Vusurovic -equipo inicial-, Skoric (líbero) y N. Gbric. y Mester.
Italia: Rosalba, Fei, Mastrangelo, Vermiglio, Bernardi, Giombini -equipo inicial- Corsano (líbero), Tencati, Cisolla, Sottile y Casoli.
Parciales: 22-25 (21m.), 19-25 (22m.), 25-22 (21m.), 25-22 (22m.) y 15-12 (14m.)