MUNICH.- El delantero Michael Owen marcó las diferencias al marcar tres de los cinco goles con los que Inglaterra derrotó a Alemania con una goleada histórica de 1-5 en el estadio Olímpico de Múnich y destrozó a la zaga germana con su velocidad y su olfato de gol.
Alemania salió jugando con tranquilidad y soberanía, lo que trajo muy pronto el 1-0 con una jugada comenzada por Michael Ballack que levantó suavemente el balón para que Oliver Neuville cabeceará desde el borde del área y dejara a Carsten Jancker sólo frente a Seamann para definir.
Sin embargo, el gol tempranero no ayudó a darle solidez al juego alemán y fue Inglaterra quien empezó a controlar el partido aprovechando ante todo la velocidad de Owen ante la que la defensa alemán parecía no encontrar fórmula alguna.
El mismo Owen fue quien logró el empate poco después de la ventaja alemana, en una jugada en la que la zaga alemana se equivocó al tratar de montar la trampa del fuera del juego.
Luego, las mejores posibilidades fueron inglesas, dos en los pies de Owen y un libre indirecto de David Beckham que Marko Rehmer sacó de la raya de gol, mientras que Alemania parecía haber perdido toda fórmula ofensiva.
Sólo una pared entre Joerg Boehme y Carsten Jancker, que culminó con un remate del primero que Seamann desvió a saque de esquina, puede ser considerada como una auténtica posibilidad alemana en la primera parte.
En el descuento de la primera parte, la superioridad inglesa se vio premiada con un golazo de Gerrard desde cerca de 30 metros que se coló por el ángulo inferior izquierdo de la puerta defendida por Oliver Kahn.
Al comienzo de la segunda parte Owen amplió la ventaja a 1-3, aprovechando un pase de Emile Heskey, lo que puso a Alemania contra la pared y le dio a Inglaterra la posibilidad de explotar el contragolpe con la velocidad de Owen y de Heskey.
En uno de esos contragolpes, tras una pérdida de balón de Ballack, Owen marcó el cuarto con lo que el partido quedó del todo sentenciado dejando a Inglaterra a las puertas del Mundial.
Otro contragolpe trajo el quinto, por medio de Heskey, lo que significó la segunda derrota alemana en la historia de las eliminatorias a los mundiales y la goleada más alta sufrida nunca por el equipo nacional germano como local.
Alemania: Kahn; Woerns (Asamoah, m. 46), Rehmer, Nowotny, Linke; Rehmer, Ballack (Klose, m. 67), Hamman, Boehme; Neuville (Kehl, m. 78) y Jancker.
Inglaterra: Seamann; G.Neville, Ferdinand, Campbell, Ashley Cole; Beckham, Gerrard (Hargreaves, m.78), Scholes, Barmby (Mc Manaman, m.65); Owen y Heskey.
Arbitro: Pier Luigi Collina (Italia). Mostró tarjeta amarilla a Heskey y Hamman
Incidencias: Partido de clasificación para el Mundial 2002, disputado en el estadio Olímpico de Múnich ante 63.000 espectadores.
Goles: 1-0: m.6 Jancker. 1-1: m. 12, Owen. 1-2: m. 45, Gerrard. 1-3: m. 48 Owen. 1-4: m. 66, Owen. 1-5: m. 74, Heskey.