BUENOS AIRES.- Argentina, con las bajas de Juan Sebastián Verón y Juan Pablo Sorín, pero ya clasificada al Mundial, recibirá este miércoles en Buenos Aires a un Brasil urgido de puntos para asegurar su boleto a Corea-Japón, en un clásico que enfrentará a dos de las tres mejores selecciones del mundo.
El partido comenzará a las 20 locales (19.00 en Chile) en el estadio de River Plate, que agotó su capacidad para 57.000 personas, y será dirigido por el suizo Urs Meier, un empresario de 42 años.
Argentina, que ganó su boleto superando 2-0 a Ecuador en Quito en su último partido, con cuatro fechas de anticipación, lidera cómodamente las eliminatorias con 35 puntos, producto de 11 triunfos, 2 empate y sólo 1 derrota, justamente ante Brasil.
Los verdeamarillos, en cambio, están cuartos con 24 puntos, en una serie llena de tropiezos, al punto que tiene a Luiz Felipe Scolari como cuarto DT en un año, en medio de críticas apenas atenuadas tras la última victoria 2-0 ante Paraguay.
El juvenil Pablo Aimar, del Valencia de España, cubrirá la baja de Verón, suspendido, mientras que Sorín, que se desgarró en la práctica del lunes, sería reemplazado por Claudio "Piojo" López, por lo que "Kily" González se retrasaría a la zona media, lo que daría un carácter aún más ofensivo al 4-3-3 de Argentina.
López, que fue titular en las primeras siete fechas de las eliminatorias, pero luego perdió el puesto ante Sorín, por una lesión, retornaría así para formar ataque junto con Hernán Crespo, su compañero en la Lazio, de Italia, que atraviesa un gran momento.
El habilidoso Ariel Ortega, único jugador del plantel que actúa en el medio argentino (en River Plate) completaría el ataque argentino, considerada por los especialistas como favorita para mañana.
La apuesta de Scolari
En Brasil, por lo contrario, los últimos indicios parecerían fortalecer un esquema cauteloso de 5-3-3, aunque con los laterales Cafú y Roberto Carlos proyectándose, cuidados por Eduardo Costa y Mauro Silva en el medio campo.
Justamente la sorpresiva presencia de Eduardo Costa, del Bordeaux francés, junto con el veterano Mauro Silva, según los críticos, parecería confirmar la cautela de Scolari, un DT atípico para Brasil, por su defensa del fútbol de marca.
"El fútbol brasileño dejó de dar espectáculo hace tiempo", se justificó Scolari cuando se le preguntó si en la práctica del domingo pasado, efectivamente, había ordenado a sus jugadores que apelaran al foul para detener el juego rival, una táctica que, según parece, será empleada mañana ante Argentina.
"Yo tengo la dignidad de decirlo de frente", agregó Scolari, sugiriendo que esa táctica es empleada por muchos de sus colegas.
Mucho menos polémico, hoy reconocido unánimente en Argentina, al punto que se da el lujo de excluir del equipo al goleador Gabriel Batistuta, el DT argentino, Marcelo Bielsa, acepta que su selección, ya clasificada, está obligada ahora a mejorar su juego.
"De un partido ante Brasil no se sale igual que como se entra. Para mejor o para peor. Es un partido que convoca mucho al sentimiento", dijo Bielsa, elogiado por su eficacia y juego ofensivo, con una fuerte presión en campo rival, pero que deja peligrosos espacios al contragolpe adversario.
Por ello, pese a que Brasil es el que precisa sumar puntos, todo parece indicar que mañana Argentina asumirá la iniciativa y Brasil especulará de contragolpe, con Rivaldo de punta, junto con Elber, controlados por Nelson Vivas y Walter Samuel, junto con el líbero Roberto Ayala.
Probables formaciones:
ARGENTINA: Germán Burgos; Roberto Ayala, Nelson Vivas, Walter Samuel; Javier Zanetti, Diego Simeone, "Kily" González, Pablo Aimar, Ariel Ortega; Hernán Crespo y Claudio López. DT: Marcelo Bielsa.
BRASIL: Marcos; Cris, Roque Junior, Lucio; Cafú, Mauro Silva, Eduardo Costa, Marcelinho Paraíba, Roberto Carlos; Elber y Rivaldo. DT: Luiz Felipe Scolari.
