BUENOS AIRES.- El mediocampista Ariel Ortega decidió no entrenarse más en River Plate, hasta tanto los dirigentes de la entidad le paguen la deuda que mantienen con él, y que supera el millón de dólares.
El hábil jugador argentino había anticipado a los dirigentes de River que si su situación no se solucionaba tras su vuelta de Paraguay, donde jugó con la selección argentina, no se presentaría a los entrenamientos, algo que finalmente ocurrió.
Desde que regresó a River, en agosto de 2000, Ortega no cobró la prima que fue pautada en 880.000 dólares, y cansado de esperar una solución, tomó la decisión de no entrenarse hasta que le den una respuesta satisfactoria a sus pretensiones.
Según indica el diario deportivo "Olé", los dirigentes de River se reunirán con el representante de Ortega, Juan Berros, para tratar de confluir en un acuerdo que revierta la decisión del jugador, quien se muestra inflexible en su postura.
Por su parte, los dirigentes de River aducen que el pago de Ortega estaba aprobado desde hacía tiempo, pero como el jugador no había pasado a retirar los cheques, estos caducaron, aunque aclararon que la situación no es tan grave.
"No hay ningún problema con el jugador Ortega. Yo mismo le di tres días de licencia. Me comuniqué con él y vendrá a retirar los cheques actualizados correspondientes a la prima que aprobó la Comisión Directiva", dijo el presidente David Pintado a "Olé".
Sin embargo, Ortega no tiene previsto asistir a los entrenamientos de River hasta que todo se solucione, mientras que el representante del jugador puede destrabar el conflicto suscitado.
Ortega jugó 50 partidos y convirtió 15 goles desde que regresó a River, tras pasar varias temporadas en Europa, jugando en el Valencia de España, el Sampdoria y el Parma, ambos de Italia.