SANTIAGO.- "No jugué bien, pese a que en el segundo semestre me recuperé". Ese es el análisis directo, frío, que hace el tenista chileno Adrián García (23 años) de la temporada 2001 que cumplió en el mundo de la Asociación de Tenistas Profesionales.
Y no se equivoca. De ser el cuarto singlista chileno mejor ubicado en el ránking de la ATP, de formar parte del equipo de Copa Davis al cabo del año 2000, el jugador oriundo de Concepción fue sobrepasado por Hermes Gamonal en la clasificación y terminó en el lugar 329°.
"El primer semestre jugé muy mal, aparte que sufrí lesiones (hombro y pie) que no me dejaron jugar tranquilo. Pero en la segunda parte del año me recuperé, comencé a jugar un tenis más sólido y le gané a varios jugadores que me superaban en ránking", dice, en su defensa, García.
Y no miente. Sus mejores resultados los consiguió en el segundo semestre (cuartos de final en los challengers de Mantova, Brasilia 1 y Curitiba) y triunfos sobre el argentino Ignacio Hirigoyen (199°), el británico Lee Childs (215°) y el brasileño Daniel Melo (288°).
Pero nada es comparable con el 2000. Hace un año le ganó a Galo Blanco (105°) y al mismo Fernando González (90°), y alcanzó las semifinales del challenger de Graz, Austria, tras dejar en el camino al austríaco Markus Hipfl, al francés Jean-Rene Lisnard y al checo Jiri Vanek.
"Este año mi meta era terminar entre los primeros 200 del ránking pero no lo logré. El objetivo se repite para el 2002 porque quiero seguir progresando, quiero mejorar todo lo hecho en estos cuatro años de profesionalismo", agrega García.
Vacaciones, pretemporada y a jugar
García cuenta que desde niño quiso ser tenista profesional y que no echará todo por la borda tras una mala temporada. "Esto es lo que elegí y quiero seguir mejorando y subiendo en el ránking", pregona.
Para eso descansará dos semanas y luego iniciará una pretemporada de un mes junto al preparador físico Alfredo Campos y al técnico Jaime Fillol. Esta se verá interrumpida la primera semana de enero porque viajará a Sao Paulo, Brasil, para jugar un challenger, pero proseguirá hasta llegar al ATP de Viña del Mar. "También iré a Estados Unidos para jugar en Dallas, California y Hawaii", dice.
"Por ránking prefieron seguir jugando challengers, sólo así obtendré los puntos necesarios para entrar directo a los cuadros de torneos más grandes. Eso lo analizaré en el segundo semestre, en una de esas tengo la posibilidad de jugar sólo torneos ATP", añade.
Claro que además de luchar contra sus rivales de turno, tendrá que hacerlo también contra su irregularidad. "No creo que la diferencia sea muy grande (con Massú, González y Gamonal), de hecho el año pasado jugué con Fernando y le gané. Creo que la diferencia de ránking pasa por la solidez, por la regularidad que cada uno alcanza durante el año. Lamentablemente, yo tengo muchos altos y bajos, y eso me perjudica".
Así de claro.