SANTIAGO.- Debe ser por culpa de la frondosidad de los naranjales que Nelson Acosta deba gritar a cada rato intentando dominar su celular. "Perdoná, pero te escucho muy mal... ¿aló, ¿aló?", dice y no es que el ex técnico de la selección chilena esté enojado, pero sólo subiendo la voz y moviendo la antena puede intentar explicar cómo mientras desde España lo dan como el nuevo entrenador del Rayo Vallecano él insista en que no hay nada de nada.
El equipo madrileño asegura que Acosta se va con ellos. Es más, incluso le habrían llegado pasajes para irse este mismo domingo para firmar el contrato por un año y por 500 mil dólares con la institución albirroja, pero Acosta entre las naranjas de su parcela de San Vicente dice no.
"Aún no tengo mi futuro definido, porque me puse como meta estudiar las ofertas hasta fin de año. Tengo dos o tres ofrecimientos que todavía estoy analizando, así que..., ¿aló?"
-Sí, lo escucho perfecto, pero entonces ¿por qué lo dan como seguro en la banca del Rayo Vallecano?
-Yo no sé nada de eso. De verdad, quiero definir todo de aquí a fin de año.
-¿Dónde va a pasar estas fiestas?
-Acá, en Chile, en el campo.
-O sea que no viaja. Dicen que hasta le mandaron los pasajes.
-No, no por ahora.
-¿Prefiere quedarse en Chile?
-¿Para las fiestas?
-No, le pregunto por su futuro...
-Ahh, es que no te escucho muy bien. Mirá, es que salir, llevarse a la familia, las cosas, es siempre difícil, pero en realidad lo que más me seduce es que sea un proyecto interesante...
...Como el Rayo Vallecano.
-¿Aló? Es que de verdad no hay nada resuelto. Sólo te digo una cosa: yo vuelvo al fútbol el 2002 sea como sea.
Eso sí que se le escuchó clarito.
