SANTIAGO.- Junto con asumir este viernes las funciones correspondientes, el síndico de Quiebras, Juan Carlos Saffie, se apersonó en horas de la tarde en la sede del club Colo Colo, procediendo, junto con otros ocho funcionarios, a la incautación de bienes y documentos, además de determinar el cierre del inmueble y despedir a los funcionarios que se encontraban trabajando en labores administrativas.
Además de explicar que las razones de esta medida se ajustan a las disposiciones legales vigentes, Saffie señaló que "vamos a sanear esta casa, para que pronto vean a un Colo Colo más vivo que nunca".
En forma paralela, en un restaurante cercano a la sede alba, se reunió en un almuerzo el grupo de ex presidentes de la institución, encabezados por Alejandro Ascuí.
Este expresó que ahora no estaba dispuesto a hacerse cargo de la situación de Colo Colo, al decir que "cambié de opinion, porque Peter Dragicevic no ha cumplido con lo acordado luego que conversamos y yo no estoy dispuesto a hacerme cargo del club en estas condiciones. Yo estaba listo para asumir por tres meses, pero Dragicevic quería que fuera por dos años y hubo otras cosas que no me parecieron bien".
El empresario añadió que seguiría observando con mucho interés la situación colocolina, pero "mientras Dragiecevic no se haga a un lado, este grupo de ex presidentes no intervendrá en nada".
En tanto, el grupo de seis ex jugadores colocolinos a quienes se adeudan dineros desde el año pasado, -Fernando Gamboa, Marcelo Peña, Marcelo Miranda, José Luis Sierra, Carlos Reyes y Marco Antonio Villaseca- se reunieron con el presidente del Sindicato de Futbolistas (Sifup), Carlos Soto, en torno a esta situación que significa un total en dinero que alcanza a los 372 millones de pesos, cifra que al no ser solventada, podría acarrear la paralización del comienzo del torneo oficial 2002.