MANIZALES/SANTIAGO.- Once Caldas, recuperado de la goleada 1-4 que le propinó Flamengo, enfrentará el jueves en Manizales a Universidad Católica de Chile por el grupo 8 de la Copa Libertadores de América.
El partido se jugará desde las 21.20 locales (23.20 en Chile) bajo el arbitraje del ecuatoriano José Carpio en el estadio Palogrande, que tiene una capacidad para 30.000 personas.
El equipo chileno tiene previsto llegar el miércoles a Manizales, 190 kilómetros al oeste de Bogotá, informaron fuentes de la Divisón Mayor del Fútbol Colombiano.
El entrenador de Caldas, Javier Alvarez, anunció "ajustes" en el equipo que enfrentará a los universitarios, para, según dijo, darle "más dinámica al equipo para mejorar las opciones de gol".
El entrenador aseguró que por ahora tiene definido el ataque con sus delanteros estrellas, el argentino Sergio Galván y el colombiano Leider Preciado. En tanto, en el mediocampo analiza varias opciones, con posibles cambios después del descalabro ante Flamengo.
Olmos quiere viajar... y ganar
Contrariando a la directiva de Universidad Católica, su entrenador, Juvenal Olmos, enfatizó que "el que tenga miedo, que no vaya a Colombia".
Los dirigentes cruzados solicitaron a la Confederación Sudamericana de Fútbol (CSF), por razones de seguridad, llevar la sede del encuentro a otro país o jugar en Bogotá donde el plantel llegaría sólo horas antes del partido.
Olmos, técnico de Universidad Católica, declaró hoy que "el que tenga miedo que no vaya a Colombia. No debemos quejarnos, sino ir a jugar y traernos los tres puntos".
Precisó que "Universidad Católica ya no puede ser un equipo que se queja, reclama y pide cambios de horarios".
