VILASECA, Tarragona.- El equipo oficial Peugeot, igual que hizo hace dos semanas en Córcega, se mantiene inabordable en el Rally de Cataluña, donde dos de sus vehículos copan las primeras posiciones.
El francés Gilles Panizzi y el británico Richard Burns dominan la clasificación, el francés Sébastien Loeb (Citroen Xsara) se ha colado en la tercera posición, mientras que el español Carlos Sainz (Ford Focus RS WRC) vive resignado por debajo de Peugeot, Subaru y Citroen, y tras concluir las tres primeras especiales es séptimo a cincuenta segundos del líder.
El campeón español ha declarado a la llegada al parque de asistencia en Port Aventura (Tarragona) que las "previsiones se están cumpliendo" y no ha achacado a ningún factor extradeportivo el domino casi insultante de la marca francesa del león y de sus socios de Citroen.
"No me puedo quejar de la situación. Estamos en la lucha entre las posiciones sexta y novena. Los puntos no están tan lejos, pero será difícil puntuar en este rally", ha señalado Carlos Sainz, quien se ha alegrado por la rápida adaptación de su copiloto Marc Martí: "Cada tramo que pasa, todo va mejor con él".
Por su parte, el catalán Marc Martí también se ha mostrado satisfecho de su actuación, después de que el jueves el dúo lamentase la falta de tiempo para adaptarse a las anotaciones de los tramos cronometrados, tras el accidente sufrido el lunes por el madrileño y Luis Moya.
La nota decepcionante de la jornada ha sido de nuevo el infortunio que ha vivido el cántabro Jesús Puras, ya que en el primer tramo rodado (Pratdip) ha tenido una avería en los frenos traseros que le han propiciado una conducción accidentada, hasta el punto de estar a un tris de salirse del trazado en un par de ocasiones.
Puras ha perdido 1:19.3 en el segundo tramo y 3:02.4 en el tercero, un tiempo (4:21.7) que le va a lastrar durante todo el rally y que devuelve al campeón español a viejas pesadillas en el Rally de Cataluña, donde vive una relación de amor y odio con la prueba española del mundial.
Hace tres años, cuando parecía que iba a llevarse la prueba, una avería le dejó tirado, igual situación que le ocurrió el año pasado, cuando debió bajarse de su coche en las carreteras de Tarragona.
En la categoría del mundial júnior, Dani Solá (Citroen Saxo) ha dado una alegría a la afición local, ya que se ha colocado líder de su categoría tras el primer tramo, aunque en el último el italiano Andrea Dallavilla (Citroen Saxo) le ha arrebatado la primera posición, al obtener una ventaja de 21:7 respecto del catalán.
Los Saxos se han sacudido por un momento el infortunio del Rally de Montecarlo, donde todos los Citroen en la categoría júnior abandonaron la prueba por problemas con el embrague.
La organización ha lanzado una llamada a la prudencia a los aficionados, después de que el primer tramo del día (Riudecanyes) haya sido suspendido como medida de seguridad a consecuencia del exceso de público que se había concentrado en la mitad del tramo.
La carrera se reiniciará en horas de la tarde, cuando la caravana de vehículos volverá a recorrer los tres tramos de la mañana.