ZÚRICH.- La FIFA ha adoptado "todas las medidas necesarias de precaución para garantizar la transmisión televisiva del Campeonato del Mundo del 2002", después de la suspensión de pagos presentada por el Grupo alemán Kirch, propietario de los derechos de la competición y también del Mundial de 2006.
"Como parte de estas precauciones, KirchMedia ha hecho una reestructuración, con el total respaldo de FIFA, que garantiza la operatividad durante y después del Mundial de 2002", indicó FIFA mediante un comunicado.
La citada reestructuración ha permitido que "todos los intereses de la FIFA en este ramo, así como la ejecución y gestión operativa de los derechos de radiodifusión del Mundial, se combinen en un grupo de compañías, con organización vertical, que dependen ahora de KirchSport SA, compañía domiciliada en Zug, Suiza".
FIFA recuerda en su nota que la dirección de KirchSport SA participa desde 1997 en todos los aspectos operativos de la televisión del Mundial y aunque su primera función fue la de agencia de ventas y servicios, en nombre de KirchMedia, la nueva estructura ha permitido ampliar sus funciones "hasta convertirse en la sociedad matriz de las entidades titulares de los derechos".
"Las dos sociedades titulares de los derechos, KirchMedia WM SA y KirchMedia WM SARL, así como los Servicios de la Emisora Local (HBS), son actualmente subsidiarias, controladas íntegramente por KirchSport SA, Suiza, y no dependen del grupo KirchMedia SARL & Cía. SCA", explica FIFA.
Las citadas empresas, que "gozan de estabilidad financiera y son completamente independientes en el aspecto legal, estarán en posición de cumplir con las obligaciones frente a las compañías radiodifusoras, pese a que se pueda incoar un proceso de insolvencia en contra de la empresa matriz, KirchMedia SARL & Cía. SCA, domiciliada en Múnich, Alemania".
La nueva estructura también garantiza, según la FIFA, los servicios de la Emisora Local (HBS) de la Copa del Mundo, bajo la continua supervisión de KirchSport SA -sociedad domiciliada en Suiza y con oficinas en Seúl, Tokio y París-, que prosigue, según lo previsto, los trabajos para la producción de la señal internacional.
"La reestructuración no afecta en absoluto a los derechos contractuales que KirchMedia ha cedido a las compañías radiodifusoras del Mundial", agrega el texto de FIFA.
La Federación Internacional de Fútbol asegura además que recibió de KirchMedia SARL & Cía. SCA, dentro del plazo acordado (15 de enero de 2002), la suma de 1,200 millones de francos suizos (820 millones de euros) y que el importe pendiente de 100 millones de francos suizos (68 millones de euros), se liquidará en los 20 días posteriores a la conclusión del Mundial, aunque "está cubierto por los correspondientes avales bancarios irrevocables".
El comunicado de FIFA termina con unas palabras tranquilizadoras del presidente Joseph Blatter. "Hemos vigilado cuidadosamente el desarrollo de la situación del grupo Kirch e implementado las medidas adecuadas para evitar eventualidades que entorpezcan las operaciones televisivas del Mundial. Nuestro socio de la televisión podrá producir una señal de gran calidad para todos los telespectadores del mundo", concluyó Blatter.