LIMA.- Por lejos no fue el mejor partido de Cobreloa en la Copa Libertadores. Al contrario, debe ser uno de los más lerdos lances de los naranjas, tanto que de no ser por el discreto rival que tenía al frente -nada peor que Alianza Lima- podría haber sido una noche triste.
Pero Cobreloa celebra. Venció 2-1 a los limeños como visitante en un
discreto encuentro en el casi vacío estadio Alejandro Villanueva, testigo heroico de 70 minutos en que no hubo nervios ni emociones.
El primer tiempo no registró ni una sola jugada de riesgo. Sabiendo que el empate era el negocio, los loínos no arriesgaron la pelota y le dieron al local la opción a adelantarse. Claro, se adelantaron, pero jamás los limeños tuvieron chance de cambiar el destino.
Recién a los 70', en la primera llegada clara, Patricio Galaz comenzó a cimentar su cartel del mejor jugador del lance desbordando por la derecha y esperando a que Mauricio Dinamarca se ubicara solo en el área chica para cederle la pelota y para que éste anotara sin inconvenientes.
Ahí recién se sintió algo de adrenalina. Herido en su orgullo, Alianza trató de revertir su suerte con pundonor. Cinco minutos más tarde, una falla de Pozo dejó habilitado a Aguirre, quien marcó el empate, primer y único local albinegro en el certamen.
Aparecieron los nervios. En Brasil, Cerro Porteño le ganaba 1-0 a Sao Caetano, por lo que le faltaba un mísero gol del aleonado elenco peruano para ocupar el casillero de los naranjas.
Hasta que Galaz, a cuatro minutos del final, entró por el centro del ataque y de nuevo esperó a que un compañero, Canobbio en este caso, entrara por la izquierda. Se la cedió y el uruguayo venció a Roverano con un tiro bajo.
El partido terminó ahí (aunque nunca quedó muy claro que alguna vez hubiese empezado). Cobreloa accede a los octavos de final como segundo en su grupo y debe esperar rival del Grupo 8. Si la UC vence a Once Caldas y Olimpia enreda puntos en su visita a Flamengo, habrá duelo chileno en esa instancia de la Copa Libertadores.