AUGUSTA.- Después de lograr con enorme autoridad el triunfo en el primer grande del año, el Masters de Augusta, el estadounidense Tiger Woods ya sueña con lograr el Grand Slam "auténtico", es decir, vencer en los cuatro "majors" del circuito de golf en una misma temporada.
El "Tigre" ya logró entre 2000 y 2001 su particular Grand Slam, al imponerse en el Abierto de Estados Unidos, el Abierto Británico, el torneo de la PGA y el Masters de Augusta de forma consecutiva, aunque en diferentes años.
Los puristas no otorgaron el mismo mérito a su serie de triunfos que a la hazaña de lograr los cuatro grandes en una misma temporada. "Bueno, ya gané los cuatro seguidos", dijo Woods. "Pero sería bonito hacerlo en el mismo año. Sería diferente de cómo lo hice la última vez".
Para su rival más enconado en el Masters, el sudafricano Retief Goosen, lo realizado por Woods es más que suficiente para compararlo con los más grandes.
"Junto a Jack Nicklaus, Tiger es el mejor jugador", aseguró. "Denle un par de años más y creo que Tiger será incluso mejor que Nicklaus. Es una cuestión de tiempo. Está realizando golpes excelentes y de gran imaginación", añadió.
De hecho, con su victoria en Augusta, Woods escribió una nueva página en la historia del golf al unirse al selecto dúo que formaban Jack Nicklaus y Nick Faldo como los únicos jugadores en lograr ponerse dos chaquetas verdes consecutivas.
El nuevo título se une a los impresionantes éxitos que jalonan la carrera profesional del estadounidense. A sus 26 años, Woods atesora siete grandes, una marca que alcanza más de un año antes de lo que lo hiciera Nicklaus, que logró un total de 18 en toda su carrera.
"Sería maravilloso ganar tantos torneos como Nicklaus", dijo Woods. "Sería fantástico, pero si no sucede, no sucede", afirmó.
La prensa mundial destaca hoy la facilidad con la que se impuso el estadounidense, que inscribió su nombre en seis de los últimos diez grandes. "Augusta cambia, pero Woods sigue consistente", tituló hoy el "USA Today" en su página de Internet.
Sobre un campo alargado en unos 250 metros que endurecían el recorrido, Woods impuso su potente pegada (consigue drives controlados a más de 300 kilómetros por hora) y su preciso putt para mostrarles a todos que es el número uno.
"Uno por uno, Ernie Els, Goosen y Vijay Singh sucumbieron bajo la presión de intentar dar caza al mejor jugador del mundo", escribió el "Times" inglés, que también comparó a Woods con Nicklaus cuando éste tenía su edad.
"Creo que la gente piensa que todo el mundo se rindió. Pero eso no es lo que sucedió sobre el campo. Pienso que fue mucho más ajustado que lo que la gente cree", dijo Woods, que se impuso con 12 golpes bajo par, tres menos que Goosen.
Después de ganarlo todo, Woods busca ahora nuevos retos. Conseguir el Gran Slam de la manera que le exigen los ortodoxos es uno de ellos y en Augusta puso la primera piedra.