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El gran hipotecón de la UC

El conjunto universitario cedió en sus pretensiones de avanzar a los cuartos de final de la Copa Libertadores al igualar 1-1 con Sao Caetano en su reducto de San Carlos de Apoquindo. Todo se decidirá el próximo miércoles en Brasil, pero los paulistas llevan las de ganar.

25 de Abril de 2002 | 21:13 | Arturo León Díaz, EMOL
SANTIAGO.- Empezó mal y terminó peor la primera historia de Universidad Católica en los octavos de final de la Copa Libertadores de América ante Sao Caetano. Los cruzados se vieron en desventaja antes de los 10 minutos, luego igualaron la lucha pero se desvanecieron antes de conseguir el tanto del triunfo. El empate 1-1 hipotecó sus aspiraciones de seguir avanzando.

Es cierto, todavía falta el partido de vuelta en Brasil, pero la balanza parece haberse inclinado para el lado de los paulistas. Por juego, por solidez defensiva y, sobre todo, porque la UC no encontró el camino para llegar con una buena cuenta de ahorro a la revancha. Y eso es mucha ventaja.

Olmos, el técnico cruzado, dispuso un planteamiento marcado por las orillas: para tapar los subidas de los laterales y también para atacar por ahí, con Ponce y Campos por la izquierda y Arancibia en sociedad con Alvarez por derecha. A primera vista parecía dar resultado, pero un error de Walker -dio un rebote tras un tiro de Adaozinho- le permitió a Anaílson abrir la cuenta.

El gol reforzó la cerrada defensa brasileña, donde los centrales despejaron todo lo que les llegó por arriba; para lo otro estaba el portero Silvio Luiz. Y la UC cayó en la trampa de los centros, ya que Ormazábal no podía solo con el armado en la mitad de la cancha.

Mas un error del arquero visitante ante un centro rasante de Ponce, posibilitó la igualdad en los pies de Campos a los 29'. Y la UC siguió machacando, pero con poco fútbol.

Olmos desarmó su pizarra, la armó con Mirosevic en la mitad y con Ormazábal asociándose con Alvarez en lugar de Arancibia. De algo sirvió, porque Segovia se adueñó del mediocampo y la presión fue subiendo, pero de la misma forma decayó. Faltó físico y sobró juego de los brasileños, que "adormecieron" el juego con su toque lateral e impredecible.

El gol del triunfo estuvo en un palo que salvó a Silvio Luiz en un zurdazo de Ponce y en un puntazo a quemarropa que el portero le detuvo a Mirosevic. También en un par de tapadas de Walker ante los intentos de Adaozinho y Anaílson.

Habrá que esperar hasta el 1 de mayo. Allá en Brasil se definirá todo, y ojalá que la UC asista a una liquidación de temporada, de lo contrario, la hipoteca que pidió en Santiago le saldrá muy cara, impagable.
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