YOKOHAMA, Japón.- La recuperación del delantero Miroslav Klose, máximo goleador del Mundial con cuatro tantos, mantiene en vilo al seleccionador alemán Rudi Voeller, que considera fundamental la alineación del jugador de origen polaco para el decisivo partido contra Camerún.
Klose, que el domingo cumplirá 24 años, ha sido la gran revelación de Alemania en este mundial. En su debut frente a Arabia marcó tres de los ocho goles y también el del empate frente a Irlanda, partido en el que fue sustituido a cinco minutos del final aquejado de un fuerte golpe en la rodilla derecha.
La delegación alemana no dio importancia a la lesión de Klose, pero la realidad es que no se ha entrenado a pleno rendimiento los tres días siguientes al partido y parece que empezará a ejercitarse mañana, domingo, según fuentes médicas del equipo.
"Desde el empate ante Irlanda, nos hemos dado cuenta de que el partido ante Camerún iba a ser decisivo, pero esto es la Copa del Mundo y hay que contar con este tipo de presión", ha comentado Voeller.
Camerún, por su parte, ha cumplido hasta ahora con creces su papel. Empató con la combativa Irlanda en el debut y superó por 1-0 a los árabes, por lo que está igualada a cuatro puntos con Alemania.
Sin embargo, mientras a los alemanes les vale con el empate para pasar automáticamente, a los cameruneses sólo la victoria les aseguraría la presencia en octavos y cualquier otro resultado estaría en función de lo que hagan los irlandeses, que suman dos puntos.
El lateral derecho camerunés Geremi Nijtap declaró sobre el partido contra Alemania se verá "lo que es capaz de hacer" su selección.
"Estoy muy confiado; sé que podemos ganar y lo vamos a hacer", dijo el todavía jugador del Real Madrid, cuya selección se juega la clasificación para los octavos de final en dicho partido, que se disputará en el estadio de Shizuoka.
"Nunca se puede dar nada por seguro, pero contra los alemanes lo vamos a dar todo porque no tenemos otra opción. Si ganamos estaremos en octavos", dijo el jugador de los "leones indomables".
El otro encuentro de la última jornada del grupo E enfrentará también el martes a Irlanda con la ya eliminada Arabia Saudí, un partido con claro favoritismo para los europeos, aunque el seleccionador Mick McCarthy ha advertido que no se fía de los árabes.
El seleccionador de Irlanda, ha replicado a los que consideran que su equipo no tendrá problemas para ganar a la matemáticamente eliminada Arabia Saudí, lo que les aseguraría una plaza en octavos de final, que "quien crea que será un partido fácil se equivoca. Yo también pensaba que Camerún les vencería sin problemas y, sin embargo, sufrieron mucho para imponerse por 1-0", comentó el ex defensa internacional irlandés sobre el rendimiento de los saudíes.
McCarthy reconoció que le había sorprendido que Alemania goleara con tanta facilidad a Arabia (8-0). "Yo les vi el año pasado contra Irán y forman un equipo muy aceptable. Todos podemos tener un mal día y eso les pasó contra los alemanes, pero no se repitió con Camerún y tampoco espero que nos den facilidades a nosotros".