LA HABANA.- Con 41 años, un evidente sobrepeso y un exigente tratamiento para seguir alejándolo de las drogas, el ex mediocampista argentino Diego Maradona pareció regresar por un día a las canchas y asumir la culpa de que su selección haya quedado eliminada en la primera fase del Mundial de Corea y Japón.
Según revela la versión internet del diario argentino "Olé", el ex futbolista se siente culpable por haberse quedado en Cuba y no alentar en persona al seleccionado argentino, que ayer empató 1-1 con Suecia y quedó fuera de competencia.
"Se me rompió el corazón cuando vi llorando a Batistuta, Verón, Crespo, el Piojo (López) y Aimar. Los jugadores querían verme con ellos. Me siento culpable. Sí, me siento culpable de la derrota", dijo Maradona, quien había conseguido la autorización oficial del gobierno japonés para entrar a la isla.
La única función oficial del ex jugador para con el Mundial fue escribir una columna en el diario suizo "Blick", que reprodujo sus pesares. "No puedo pasar por alto los errores de Marcelo Bielsa. Debió haber puesto a Batistuta y a Crespo juntos en el ataque desde el comienzo del partido, y a la Brujita Verón detrás de ellos".
